El Concello recuerda que estos locales tienen que registrarse
05 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La temporada de furanchos ya está abierta en Marín y los vecinos que deseen poner el suyo en marcha deberán tramitarlo ante el Concello, siguiendo la ordenanza que los regula y que permite esta actividad hasta el 30 de junio. La concejalía de Turismo explicó que los interesados en poner en marcha un furancho podrán hacerlo en el período citado, pero siempre con un máximo de tres meses por temporada en cada caso. El Concello de Marín clasifica como furancho a aquellos locales que «se utilizan principalmente para a venda privada, onde os propietarios venden o excedente do viño da colleita propia elaborado na casa para o seu consumo particular». Se autoriza la venta también de tapar siguiendo la modalidad que figura en la normativa municipal. No se puede ofrecer vino embotellado, sino que los caldos deben proceder directamente de los barriles, que tendrán que ser numerados.
Además de los furanchos, existe la modalidad de los loureiros, también llamados abillados. «A única diferenza cos anteriores radica en que nestes os produto alimentarios son levados pola clientela», manifiestan desde el Ayuntamiento.
La normativa marinense exige que estos locales tengan una superficie de entre 10 y 150 metros cuadrados. Además, deben cumplir la normativa de prevención y protección contra incendios, así como las medidas sanitarias relativas al tabaquismo, la venta y suministro de alcohol a menores y la publicidad de este tipo de productos.
Para que un furancho pueda estar operativo en Marín es necesario que su propietario lo incluya en el registro municipal de furanchos y loureiros. El horario de apertura está encuadrado entre las doce del mediodía y las doce de la medianoche. De viernes a domingo, así como las noches anteriores a los festivos, se amplía este permiso en una hora. Toda la ordenanza se puede consultar en la web del Ayuntamiento (www.concellodemarin.es).
Marín no es el único concello de la comarca que está activando los furanchos. En Poio, el Ayuntamiento también se encuentra tramitando la renovación de los 16 locales que ofertan el sobrante del vino de las cosechas caseras a los visitantes. Al igual que en Marín, solo se pueden abrir hasta el 30 de junio.