Los danzantes realizarán varias actuaciones a lo largo del itinerario de la procesión que recorrerá hoy la villa
29 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.La Danza das Espadas, declarada de Interés Turístico de Galicia por su antigüedad, singularidad, arraigo y valor cultural, centra hoy las fiestas patronales de san Miguel en Marín.
La primera referencia de esta danza, con más de cuatro siglos de historia, data de 1639 y para su protección, investigación y difusión se creó el Padroado de Mareantes de san Miguel, que en la actualidad es el órgano que trata de transmitir a las nuevas generaciones el mantenimiento de esta tradición.
Los actos de esta festividad arrancarán a las 10.45 horas con una recepción a los danzantes en el Concello, donde además se celebrará el acto solemne de entrega de medallas y distinciones a los nuevos cofrades de honor del Padroado de san Miguel y a los danzantes que llevan más de diez y veinte años participando en la danza.
Una hora después se celebrará la misa solemne en el Templo Nuevo, en la que sonarán las voces del Coro de Cámara Thalasa. Y a su término saldrá la procesión con la imagen de San Miguel, acompañada por los grupos de baile, que actuarán en varios puntos del recorrido.
La primera danza que interpretarán tendrá como escenario el entorno de la Alameda. La segunda, en la plaza de España, donde se procederá a la tradicional quema de madamitas. Y la tercera actuación será en la Praza do Reloxo, con una ofrenda floral como remate.
Las calles por donde discurrirá la procesión fueron engalanadas por el Concello de Marín con lonas blancas y cubos en los que se cuenta la historia de la danza das Espadas. Más que una tradición, esta coreografía que interpretan hombres y mujeres, mayores y niños -ellas de blanco con banda azul y ellos con banda roja- es ya todo un símbolo de la villa marinera y cada año atrae a centenares de visitantes que comparten los festejos con los marinenses.
Este sábado se celebra también la fiesta de San Migheleiro, un peregrinaje por los locales de hostelería de la villa para degustar pinchos y bebidas a precios populares.