Empieza el control arqueológico en una finca de la rúa do Forte, en marín

Marcos Gago Otero
marcos gago MARÍN / LA VOZ

MARÍN

MARCOS GAGO

La mejora de la parcela pública lleva atascada un año y medio

26 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los profesionales de Anta da Moura, contratados por el Concello de Marín, comenzaron ayer por la mañana el control arqueológico de una finca municipal en la curva de la rúa do Forte, en el barrio de A Banda do Río. Esta es una intervención obligatoria, al encontrarse esta parcela dentro del área de protección histórica de la localidad. La intención del gobierno marinense es que una vez que rematen estos trabajos, se pueda proseguir con el plan de adecentar esta finca y habilitarla como un pequeño parque.

El ejecutivo local comenzó a finales del 2016 a realizar la mejora de esta parcela, derribando el cierre de bloques de hormigón que la rodeaba. El Concello actuaba ante las quejas reiteradas de los vecinos del Peñón da Banda do Río, cansados de que esta finca, llena de maleza, fuese un espacio refugio para alimañas, además de dar una mala imagen del centro urbano. El equipo de gobierno quería poner mesas y bancos y una zona ajardinada.

Una denuncia del BNG advirtió de que no se estaba guardando el procedimiento de un control arqueológico y que no se había pedido el visto bueno a Patrimonio. Los nacionalistas creían que podría afectarse a ruinas del antiguo Forte de San Fernando, que da nombre al lugar. No obstante, las posibilidades de encontrar restos de la antigua fortificación en este ámbito son escasas, ya que el grueso del Forte estaba situado al otro lado de la carretera y no se conserva nada de sus estructuras. Los arqueólogos trabajarán aquí previsiblemente dos o tres días. Por ahora lo único que han aparecido son suelos de viviendas modernas demolidas y materiales de relleno.