Mientras el centro de Cotobade está en construcción, la referencia de la provincia de Pontevedra en cuanto recuperación de fauna silvestre continúan siendo las instalaciones de Cotorredondo, en Marín, ¿Cuántos animales hay allí ahora mismo? Dicen quienes se ocupan de ellos que no es fácil dar cifras, porque, precisamente, el centro está pensando para que entren animales enfermos y salgan en cuanto se hayan recuperado. Vamos, que haya rotación. Pero cuentan también que hay determinados animales «irrecuperables». Son aves o mamíferos que debido a la patología que sufren no pueden regresar a la naturaleza, «simplemente porque no sobrevivirían». Hasta hace poco, esos animales iban quedándose en Cotorredondo. Pero urgía buscar una solución porque el espacio, obviamente, es limitado. Una técnica de Medio Ambiente señalaba ayer que se llegó a un acuerdo con el zoo de Vigo y que ahora se manda allí a muchos de esos animales que, si bien por sí mismos no pueden sobrevivir, sí pueden tener una segunda vida en el zoológico. Es el caso de una jineta tuerta que viajará hasta la ciudad olívica.
Otros de los animales que salieron de Cotorredondo para formar parte del zoo de Vigo son un buen número de aves nocturnas, tales como mochuelos, lechuzas o búhos. ¿Qué les pasaba para no poder vivir libres? Lo señalaba ayer la técnica de Medio Ambiente: «Algunas tenían roturas de alas imposibles de curar». Esta misma profesional indicaba: «Es muy positivo que puedan ir al zoo, porque en el centro de recuperación no podemos tener tantos animales irrecuperables si queremos que puedan entrar más para ser atendidos».
Otras aves, que no tienen patologías pero son invasoras, como las cotorras argentinas, también se enviaron al zoo. Y también se fueron tortugas de Florida al acuario de O Grove.