Seis razones para la continuidad

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

MARÍN

El peso económico y laboral de Ence y su apoyo al sector forestal de Galicia son algunos de los argumentos de la empresa que ahora comparte el PP para defender su futuro

28 mar 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

Ence Pontevedra es la principal industria y uno de los mayores motores económicos y laborales de la comarca. Además está consolidada como una referencia en su sector a nivel internacional por la calidad de su gestión ambiental y también de su producto, pasta de papel TCF, es decir, totalmente libre de cloro. Estas son algunas de las razones que la empresa ha utilizado en estos últimos años para defender su continuidad, y a las que ahora se suma el PP.

Impacto en el empleo. Un estudio de la consultora KPMG constató que más de cinco mil personas trabajan en Galicia, de manera directa o indirecta, gracias a la actividad de Ence Pontevedra. De esta cifra, más de 800 empleos en la capital, Marín y Poio dependen de la actividad de la instalación de Lourizán. Más de 2.000 puestos de trabajo son exclusivos del sector forestal, lo que implica que la pastera representa aproximadamente el 30 % del empleo del sector de la selvicultura y de la explotación forestal en Galicia.

Desarrollo rural. Con una apuesta fuerte por el sector forestal gallego, Ence induce un efecto vertebrador en las zonas rurales, con la compra de madera, la gestión de las masas forestales y otras actividades complementarias. Esta implicación permite que se genere actividad económica en las zonas rurales, contribuyendo a frenar la despoblación. Desde el 2010, no ha entrado en Ence Pontevedra ni un solo tronco que no proceda de Galicia (70 %) o del norte de Portugal, en el entorno de Camiña a la frontera. Hay acuerdos con organizaciones de productores, que apoyan sin dudar la continuidad de la pastera.

Repercusión en la economía. Los cálculos de KPMG revelaron que Ence Pontevedra aporta al PIB autonómico cerca de 460 millones de euros, es decir un 0,82 % del total. En el ámbito del sector forestal el peso de la fábrica de Lourizán es enorme: genera más de 166 millones del PIB forestal, es decir, un 29 % del total de este ámbito productivo.

Exportaciones y el Puerto de Marín. El 96,4 % de la producción de pasta de papel del complejo pontevedrés se destinó el año pasado a la exportación a distintos países de Europa. Este tráfico es vital para el puerto de Marín, que cuenta con la única terminal cubierta del norte de España, diseñada expresamente para la manipulación de la pasta de papel. En el 2014 se transportaron por vía marítima desde Marín cerca de 400.000 toneladas de pasta TCF a una docena de países.

Cuidado de masas forestales. Ence gestiona unas once mil hectáreas de bosques, siguiendo un modelo donde la sostenibilidad ambiental se cuida con esmero. El 54 % de las masas forestales gestionadas cuentan con certificación FSC y un 86 % con PEFC.

Modernización de la planta. La fábrica de Pontevedra es una referencia entre las pasteras a nivel internacional por sus programas de control ambiental. Los principales indicadores para medir el efluente, la demanda química de oxígeno (DQO) y la demanda biológica de oxígeno (DBOS), se encuentran muy por debajo de los límites marcados por la legislación en España y la UE. La factoría cumple con todos los valores de BREF (Best Avaliable Techniques Document Reference). Se están tomando medidas firmes para la supresión del impacto oloroso y se actúa también en la reducción del impacto visual -penachos de vapor de agua-.

Informe de la Xunta. La concesión de Ence en Lourizán acaba en el 2018 y su futuro está actualmente pendiente de dos trámites. Por un lado, está el expediente de caducidad de la concesión. Si la decisión es favorable a la empresa, esta puede pedir la prórroga de la concesión, acogiéndose a la Ley de Costas del 2013. La última palabra la tiene el Estado, pero Costas también recuerda que la Xunta, como Administración autonómica, tiene que elaborar un informe que será «determinante», aunque «no vinculante» para la decisión de Madrid. Precisamente en Santiago se ha ido girando desde una postura pública elusiva a una aceptación del criterio del interés general de Galicia a la hora de emitir este informe. Visto el impacto de Ence en las cuatro provincias, todo parece indicar ahora que ese dictamen será favorable.