La bicicleta «cochambrosa» de Teo en «Velvet»

CUNTIS

RAMON LEIRO

El restarador y coleccionista Eusebio Rivero cedió a la productora de la serie televisiva una BH de 1940

04 nov 2015 . Actualizado a las 18:23 h.

ATeo, que tiene siete años y es hijo del pontevedrés Eusebio Rivero, conocido coleccionista y restaurador de bicicletas antiguas, no le hizo ninguna gracia oír a José Sacristán en la tele referirse a su bici como «cochambrosa». Pero el cine es así. Es una BH de 1940 y los responsables de ambientación de la serie Velvet, que se emite los jueves en Antena 3, contactaron con su padre para que se la cediera a través de la web de ANBAC, la Asociación Nacional de Bicicletas Antiguas y Clásicas, a la que él pertenece. «Querían una de niña de esa época y le ofrecí varias más bonitas y en mejor estado, como una Honor y una GAC de seminarista, pero se ve que buscaban una menos reluciente y eligieron esa», cuenta Eusebio. «A mí me la ofreció un señor y cuando se la compré dudé porque le faltaban piezas originales, estaba repintada y bastante estropeada, pero mi hijo la probó y dijo que la quería». Así que la restauró y pasó a formar parte de su colección Ancian Velo Atelier, de más de 50 bicicletas con las que se puede recorrer todo el siglo XX sobre dos ruedas.

La escena

Velvet es una creación de Bambú Producciones y se da la casualidad, además, de que una de sus directoras ejecutivas es Teresa Fernández-Valdés, de raíces pontevedresas. La serie se desarrolla en la España de 1958, en unas Galerías de Moda, y la escena en la que salió la bici de Teo y de Eusebio se emitió hace un par de semanas. Fue en el capítulo en el que la protagonista, Ana (Paula Echevarría), desaparece y su tío, don Emilio (José Sacristán), roto de dolor, recuerda cuando de niña le enseñó a andar en una «bicicleta cochambrosa», con la que sufrió una caída y creyó que la perdía. No es la primera vez que a Eusebio Rivero lo llaman de la tele para pedirle una de sus bicis antiguas. «En Luar salieron unas cuantas», recuerda. También prestó alguna para las fiestas de la Belle Époque de Cuntis y Sada. Y no hace mucho le vendió a Orbea, que este año cumple su 175 aniversario, una bici de esta marca de 1942 que tienen expuesta en Barcelona.

Las joyas

Gran parte de su colección Ancian Velo Atelier ya se expuso en el Pazo da Cultura de Pontevedra el pasado año, donde se pudieron ver sus joyas de la corona. Por ejemplo, una BH y una Orbea que utilizaban indistintamente el científico Cruz Gallástegui y el también investigador Antonio Odriozola para moverse por la Misión Biológica, y otra BH especial de 1919 que perteneció a un señor de Santiago.