La Festa do Petote, un homenaje a todas las mujeres del rural

Alfredo López Penide
L. Penide COTOBADE / LA VOZ

CERDEDO-COTOBADE

emilio moldes

La cita de Carballedo distribuirá este domingo cerca de medio millar de raciones

10 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Aínda de que caían chuzos hai que ir comer o petote». Con estas palabras, el alcalde de Cerdedo-Cotobade invitaba ayer a acudir este domingo a la Praza da Chan de Carballedo para participar en la novena edición de la Festa do Petote que se presentó ayer en la sede de Turismo Rías Baixas.

Tras remarcar que con nueve ediciones ya es una «cita consolidada dentro do calendario gastronómico da nosa bisbarra», Cubela espera que «esta festa valga para homenaxear a todas as mulleres do rural. As nosas avoas, as nosas nais, as nosas antepasadas que nuns momentos moi difíciles de escaseza, de fame, foron quen de crear este produto, o petote, para completar o prato do cocido».

Pero, ¿que es el petote? La cocinera Carmen A de Perdiz, considerada como una de las personas que mejor lo prepara, destacó que «é un ingrediente máis do noso cocido galego», un bollo cocinado en el agua del cocido. «É un atractivo culinario que non nos debemos perder», subrayó Santos Héctor al respecto.

El diputado provincial de Turismo englobó producto entre los «manxares de inverno» que, a lo largo de los siglos, han venido surgiendo en torno al cocido. De hecho, este domingo se esperan repartir cerca de medio millar de raciones, su precio 15 euros en el caso de adultos y 5 en el supuesto de los niños.

Será una jornada en la que no faltará la música, ya que estará amenizada con el grupo Foula y las Pandereteiras de Quireza, así como se podrá disfrutar del vistosidad de cuatro comparsas. En el caso de que la climatología no acompañe, su desfile se desarrollará en el pabellón de deportes.

Los secretos del petote

En la presentación de esta fiesta, Cubela reveló dos secretos de este producto. Su consumo «fai máis doado dixerir as graxas do cocido», así como confesó que «para min está máis rico ao día seguinte sofrito cun pouco de chourizo». Está claro que la Festa do Petote, parafraseando a Santos Héctor, «veu para quedarse»