Pero, ¿cómo funciona? Desarrollado por la firma Ecolagunas, este sistema requiere de una fase previa de eliminación de gruesos y sólidos en suspensión. En cuanto al humedal en sí, dispone de un lecho de grava impermeabilizado y aireado a través del cual fluyen las aguas residuales y sobre el que se asientan plantas macrófitas -carrizo o caña fina- que eliminan los malos olores, mientras que unos microorganismos se ocupan de la depuración de contaminantes.