El pasado miércoles la Xefatura Territorial de la Consellería de Sanidade en Pontevedra remitió un escrito al Concello de Caldas de Reis para que, «de xeito inmediato», procediera a señalizar el río Umia. En concreto, instaba al Ayuntamiento a informar a la población sobre el peligro que puede suponer el baño y realizar actividades acuáticas en el río Umia, debido a la presencia de cianobacterias en el embalse de A Baxe.
Desde Sanidade se subraya que aunque en el municipio de Caldas no existen zonas de baño censadas oficialmente, sí se tiene constancia de que hay personas que se bañan y realizan actividades acuáticas en el entorno de la presa. En una inspección visual llevada a cabo por técnicos de la Xefatura se comprobó la ausencia de esa señalización.
Recibida la comunicación del departamento autonómico, el gobierno local de Caldas ordenó a sus técnicos que instalaran esa señalización en el malecón de la carballeira y en la cascada de Segade, las dos zonas principales de baño para vecinos y turistas. No obstante, los carteles no aluden al alga tóxica Microcystis, responsable de que las aguas del pantano se tiñan de verde. En el escrito de Sanidade se especificaba expresamente el contenido y el modelo de señal, que nada tiene que ver con las colocadas. En los carteles instalados solo figuran cuatro palabras -«Prohibición permanente del baño»- y un círculo con el icono de una persona nadando con la señal de prohibido. Ese folio blanco está dentro de un plástico, para evitar que se estropee si llueve, y clavado en un árbol, en el caso del malecón, con cuatro chinchetas. Debería poner, «presenza de cianobacterias tóxicas».