«Alguien me agarró la cabeza, me tiró contra el coche y me rompió dos dientes»

Tino Rascado

BUEU

La jugadora y su hermana, ambas del Bueu femenino, denuncian que fueron agredidas tras el partido contra el Tomiño

07 abr 2010 . Actualizado a las 11:49 h.

La violencia ha vuelto al fútbol de O Morrazo. En esta ocasión en el encuentro femenino de la Copa Galicia entre el Tomiño y el Bueu, que acabó con una pelea entre aficionados y jugadoras. La jugadora del Bueu Verónica Torres salió en ambulancia tras permanecer cerca de dos minutos inconsciente y con dos dientes rotos. Verónica explicó: «Alguien me agarró por la cabeza, me tiró contra el coche de mi hermana y me rompió dos dientes».

La presidenta del Bueu, María Jesús Gil, cree que el motivo que provocó la reyerta fue que su jugadora Rocío Torres mostró los pechos al público tras marcar el tercer gol y eso fue el origen de la pelea.

La dirigente del Bueu declaró a La Voz que durante el partido no hubo incidentes, pero al final los directivos del Tomiño mostraron «indignación cuando una de nuestras jugadoras, Rocío Torres -trilliza de Verónica y Carmen que militan en el mismo equipo-, tras conseguir el tercer gol, levantó la camiseta y mostró los pechos al público». A partir de ese momento, aficionados locales «pusieron como excusa que el hecho de haber enseñado los pechos había sido una provocación», según dijeron a María Jesús Gil directivos y aficionados del equipo de Tomiño.

El partido, que terminó con empate a 3 goles, no tuvo complicaciones hasta después de que el árbitro indicase el final. Tras ducharse, las jugadoras del Bueu se subieron en sus coches y la presidenta «optó por acompañar a las trillizas. Rocío arrancó el coche y bajó la ventanilla y solamente les dijo 'vamos a ganar la Copa' a unos aficionados».

A partir de ese momento, señala María Jesús Gil, «la madre de una jugadora del Tomiño, según me dijeron, se acercó a la ventanilla y le pegó un sopapo en la cara. Empezaron todos a pelear y se unieron hombres de 40 y 50 años que agredieron a chicas de 20».

«Fue un escándalo», subrayó la dirigente, quien añadió que, a partir de la bofetada que había recibido Rocío, «salieron del coche sus hermanas a defenderla». «Yo me metí en el medio -explica- , varias jugadoras también salieron del coche y se montó un lío».

Verónica Torres manifestó que todo se estaba desarrollando bien hasta que un grupo de espectadores se echó sobre ellas y fueron agredidas de forma brutal.