El vivero de empresas ultima su apertura tras años de espera

Lars Christian Casares Berg
ch. casares PONTEVEDRA / LA VOZ

BARRO

Las instalaciones arroparán proyectos durante dos años

13 oct 2015 . Actualizado a las 12:41 h.

Un año después de su adjudicación, pero tras una década de polémica en torno a su ubicación, patrocinio y modelo, el vivero de empresas que está llamado a amparar los proyectos de emprendedores de la comarca de Pontevedra enfila su apertura inminente. Aún falta un calendario oficial definitivo, pero la contratación del equipamiento informático para las instalaciones es el último paso que ha dado la Diputación de Pontevedra para un proyecto que está a punto de iniciar su actividad con 16 gérmenes de empresas. Podría abrir sus puertas a estos incipientes empresarios antes de fin de año o a comienzos del 2016, como muy tarde.

Lo hace en plena fiebre emprendedora, una opción a la que cada vez se abrazan más jóvenes en la comarca, especialmente entre los menores de 35 años, para hacer frente a unas cifras del paro que afectan directamente a 3.552 de ellos. El vivero de empresas pretende ahora apuntalar su impacto de la mano de una incipiente recuperación económica que podría beneficiar a los proyectos que allí se instalen.

Desarrollarán sus primeros pasos en el mundo de la economía bajo un concepto de edificio con naves con un carácter modular, de forma que los espacios se puedan adecuar a las necesidades de los distintos proyectos de los emprendedores y combinarse entre ellos para buscar la colaboración entre las distintas actividades económicas que desarrollarán los primeros 16 gérmenes de empresas con los que arrancará.

Como estos se instalarán allí por un tiempo limitado -en principio dos años a un coste cero de alquiler de las instalaciones-, el diseño debe poder amoldarse a cada uno de los proyectos que sucesivamente vayan llegando.

Cuando se eligió el polígono de Barro-Meis para instalar el vivero empresarial se buscó las sinergias que dos comarcas como la de Pontevedra y O Salnés podían generar entre sí. Más de nueve mil empresas están instaladas en la primera, y otras ocho mil quinientas en O Salnés. Ocho de cada diez de ellas se ajustan a los patrones que han hecho del emprendimiento más una salida profesional autogestionada que una vía para la creación de grandes conglomerados empresariales. Ese ochenta por ciento de las empresas tienen dos empleados o menos, según los datos de un informe encargado por la Diputación de Pontevedra.

Sin embargo, el Incyde, el Instituto Cameral para la Creación y Desarrollo de la Empresa, que colabora en el proyecto a través de los fondos Feder de la Unión Europea para la promoción del empleo, explica que hay una diferencia sustancial entre aquellos que emprenden en solitario y los que lo hacen tutelados y asesorados en un vivero empresarial: la tasa de supervivencia de estas empresas es mucho mayor gracias a esta experiencia.