Discordia con el párroco
Germán Piñeiro indicó que en Seixido existe la tradición desde hace más de un siglo por la que los vecinos acogen en su casa una pequeña imagen de la virgen Peregrina, que va rotando por las viviendas. Durante el primer año de la pandemia, hubo que suspender todo, pero en el 2021, con cierto regreso a la normalidad, según la versión de Piñeiro, los vecinos pidieron al párroco que hiciese la misa de la Peregrina. El cura no aceptó, pero sí dio permiso para que pudiese oficiarla cualquier otro sacerdote.
Los vecinos hablaron entonces con otro cura destinado en Ponteareas y que está vinculado con A Lama, al ser originario de Antas. «Na véspera, o cura dixo que non, que o único que podía entrar na igrexa para dar misa era el», comentó Piñeiro.