Siete meses y medio de cárcel por el maltrato a una yegua que terminó siendo sacrificada
A LAMA
La Audiencia deja claro que tener un animal enfermo atado a un poste «es una forma de tortura»
18 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Un vecino de Gaxate, en el municipio pontevedrés de A Lama, acaba de ser condenado a siete meses y catorce días de prisión por el maltrato que causó a una yegua, la cual tuvo que ser sacrificada por los servicios veterinarios. Asimismo, la Audiencia Provincial le impone un año y once meses de inhabilitación para el ejercicio de cualquier profesión, oficio o comercio que tenga relación con animales, además de que se le prohíbe específicamente tener animales a su cargo durante este mismo período de tiempo.
La sentencia reseña que desde finales de diciembre del 2015 el acusado tenía a su cuidado una yegua que le habían regalado. Si bien, se incide en que «omitió de modo voluntario las más elementales obligaciones de cuidado del animal, tanto de alimento y bebida como de revisiones veterinarias, situación que se mantuvo hasta que casualmente fue detectada por una vecina».
El estado lamentable del equipo llevó a la mujer a ponerse en contacto con el Seprona. El 4 de julio de ese mismo años, agentes de la Guardia Civil corroboraron que «la yegua estaba atada a un poste, sin comida ni bebida, y con una herida en una de sus patas colonizada por las moscas».
Apenas cuarenta y ocho horas más tarde, un veterinario determinó que sufría un muy grave cuadro de desnutrición con pérdida de masa corporal, que se sumaba a las lesiones que presentaba en una pata, una inflamación con herida abierta infectada y colonizada por larvas de mosca. De igual modo, se constató que el estado que presentaba «no permitía un tratamiento eficaz, por lo que se procedió a su sacrificio».
La Audiencia sostiene que «no es fácilmente entendible que una persona que tiene animales, los cuida y los alimenta, les procura asistencia veterinaria y, a veces se ocupa de los animales de otras personas, no pueda entender que el tener a un animal enfermo y atado a un poste, es una forma de tortura que desembocará en la muerte del animal».