Prisión para los atracadores de tiendas de Cash Galicia tras robar 40.000 euros desde enero
A LAMA
Los implicados actuaban los viernes a la hora del cierre y les procesan también por falsear las matrículas de su coche
15 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El juez ordenó ayer el ingreso en la prisión de A Lama de los dos supuestos atracadores que protagonizaron una oleada de asaltos con escopeta y pistola en la provincia de Pontevedra a supermercados de la cadena Cash Galicia que surten a mayoristas e bebidas y alimentación. Ante el juez, ambos se acogieron a su derecho a guardar silencio. Terminan así cuatro meses de asaltos en los que estos encapuchados, presuntamente, obtuvieron un botín de unos 40.000 euros. Los detenidos son un pontevedrés de 50 años y un croata de 43, ambos vecinos de Nigrán y con un amplio historial delictivo.
La Policía Nacional les atribuye cuatro atracos consumados entre el 31 de enero y el 11 de mayo. Dos asaltos fueron en el mismo local de Vigo (se llevaron 11.000 euros el 31 de enero y 9.000 el 15 de marzo), otro en Vilagarcía (12.500 euros el 15 de febrero), y otro en Sanxenxo (11.000 euros el 14 de abril).
El quinto robo que se les atribuye, en Ponteareas, resultó fallido. Fue el 7 de mayo, cuando fueron a asaltar ese supermercado pero el empleado bajó la verja antes de la hora. Volvieron el pasado viernes, día 11, sin sospechar que la Policía ya les seguía la pista. Los equipos especiales de los GOES interceptaron a los delincuentes antes de que entrasen en el establecimiento, un Cash Record en Ponteareas. Los agentes querían evitar heridos dentro de la tienda y los pararon en plena vía pública. Fuentes policiales señalan que uno de los atracadores hizo ademán de sacar una pistola y los funcionarios dispararon dos tiros al aire para disuadirlos.
Robo de matrículas
El juzgado que los envió a prisión les investiga por delitos de robo con intimidación en un establecimiento abierto al público, con agravante de disfraz, y por un delito de falsedad ya que robaron placas de matrícula de otros coches para camuflar el suyo. También se les atribuye tenencia ilícita de armas, ya que portaban una escopeta y dos pistolas. La Policía manejó varias pistas durante la investigación, e incluso se llegó a sospechar que pudiesen tener un topo en la empresa. Los atracos se hacían cada dos o tres semanas, todos en viernes y en la hora del cierre, cuando estos establecimientos mayoristas tienen más efectivo en caja.