Aviso del banco de alimentos: «No donemos a Valencia como pollos sin cabeza, en Galicia hay mucha necesidad»
PONTEVEDRA
Esta entidad, que está organizando su recogida anual de comida y apenas encuentra voluntarios en Pontevedra, indica: «Aquí también hay gente pasándolo mal, no nos olvidemos»
07 nov 2024 . Actualizado a las 19:06 h.José Luis Doval, portavoz del banco de alimentos en Pontevedra, es el primero que tiene el corazón encogido con la tragedia sembrada por la dana en Levante. Lo dice con todas las letras: «Es desolador, terrible y terrorífico». Es más, cuenta que está allí a su hijo echando una mano porque por la profesión que tiene así se lo requirieron. Pero siente que hay que darle un recado importante a la sociedad: «No donemos a Valencia como pollo sin cabeza, están desbordados con todo el cargamento de comida que tienen. Aquí también hay gente pasándolo mal, tenemos muchas necesidades y este año está siendo especialmente duro». Pronuncia esa frase y luego explica que el banco de alimentos está a las puertas de llevar a cabo su recogida anual de comida. Y que seguramente sea difícil hacerla porque todo el mundo está con la mente en Valencia: «Es normal que así sea, pero aquí tenemos muchas necesidades. La gente sin recursos de aquí también nos precisa», señala.
Conforme la ola solidaria de Valencia fue creciendo por toda España en general y Galicia en particular, el banco de alimentos fue siendo consciente de que la desorganización en la llegada de comida a los damnificados pronto iba a surgir y que los encargados de recepcionar todo lo que se envíe se iban a ver descordados. «Y así está siendo, desde allí nos dicen que no pueden dar cabida a más comida», señalan en el banco de alimentos. Por ese motivo se tomó una decisión: los almacenes de la entidad tanto en Vigo como en Pontevedra —en el caso de la capital pontevedresa está ubicado en la calle Faustino Santalices— van a ser depositarios de la comida solidaria que los ciudadanos quieran enviar a Valencia. ¿Qué significa esto? Que se anima a quienes quieren ser solidarios por la dana a no mandar de forma indiscriminada cargamentos de comida a Levante sino a darla al banco de alimentos y que sea este el que a lo largo del tiempo la vaya enviando allí cuando realmente se necesite y se pueda recepcionar en condiciones. «Es que de lo contrario va a acabar la comida en estado de descomposición», explican. De todas formas, señalan que ahora mismo lo más razonable sería hacer donaciones económicas para evitar la acumulación de kilos y kilos de alimentos en Valencia. Para los que quieran optar por esta opción ponen a disposición la cuenta bancaria de la Fesbal —la Federación Española de Bancos de Alimentos— porque, señalan, «está garantizado que cada euro que se meta ahí estará bien invertido en comida, pero cuando haga falta».
Mientras tanto, desde aquí, conscientes de que será difícil llevar a cabo la recogida de alimentos para las familias necesitadas gallegas en un momento en el que la mente está puesta en Valencia, tratan de buscar voluntarios para su gran recogida anual, que tendrá lugar los días 22 y 23 de noviembre y que, como es tradición, se llevará a cabo en los supermercados —en prácticamente todas la cadenas—, donde se podrá donar alimentos o hacer aportaciones económicas en caja.
Se precisan 500 voluntarios
El problema es que para poder hacer esa campaña con la que el banco de alimentos subsiste hasta primavera se necesitan manos voluntarias. Concretamente, en Pontevedra y el norte de la provincia se precisan 500 personas para que acudan a los supermercados los días de la recogida. Y, de momento, no se está apuntando personal. Así que el banco de alimentos lanza un SOS: «Con tener cuatro horas para venir es suficiente», dice José Luis Doval.
Diana Nogueira se viste de azul para que se vea que «aquí también hay necesidad»
Cada año, el banco de alimentos elige a una persona conocida como madrina de su recogida anual para intentar darle visibilidad a esta iniciativa, ya que de ella depende que la entidad cuente con víveres hasta el mes de mayo. En esta ocasión el honor le tocó a la presentadora y actriz Diana Nogueira, que este martes, ya con el peto azul que identifica a los voluntarios puesto, hablaba con grandes dosis de emoción de su cometido: «Estoy feliz y orgullosa. Esto es un regalo de la vida. Ojalá podamos juntar más kilos de alimento que el año pasado, aunque mi predecesor como padrino, Iago Aspas, dejó el listón muy alto», señalaba ella.
Nogueira estuvo este martes de visita en el banco de alimentos pontevedrés. Lo hizo para conocer las instalaciones y animar, en primer lugar, a que aparezcan voluntarios para participar en la recogida anual: «Hacen falta muchas, muchas manos, que la gente no deje de venir». Luego afirmaba que le ha tocado un año «difícil, difícil» y explicaba los motivos: «Primero, porque acaba de morir Iván, el presidente del banco, al que yo conocía y que derrochaba una pasión por ayudar increíble. Y segundo porque todos estamos con Valencia, pero hay que insistir en que aquí también hay necesidad».