Un Cisne irregular no logra rentabilizar su despertar en Santander tras el descanso

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

ADRIÁN BAÚLDE

Furtado tuvo la última ocasión para poder anotar antes del pitido final

03 nov 2024 . Actualizado a las 23:09 h.

No cabe duda que el Cisne fue de menos a más en el pabellón de Santander hasta el punto de acercarse al triunfo en los últimos minutos de partido después de ir a remolque en la primera parte. Tardaron en coger el ritmo y acusaron el esfuerzo de la victoria del miércoles en Copa del Rey. Y es que la falta de ideas en ataque condicionaron al conjunto blanco en la primera parte. A su poco acierto se sumaba una defensa férrea de los locales que arrancaron con un parcial 4-0, que dejaba ver quién mandaba en su feudo.

Fue Bruno Vázquez el encargado de inaugurar el marcador para los visitantes, pero fue insuficiente. A los pocos minutos estaban ya 8-2 obligado a Marcos, Quiños, Otero a pedir un tiempo muerto. Pérdidas de balón, errores en defensa y un Sinfín muy centrado llevaron al Cisne a no ser capaz de voltear el electrónico. Hubo que llegar a los últimos diez minutos para ver qué otro resultado es posible. Mateo Arias, máximo anotador del partido, se encargó de hacer el trabajo de hormiguita y ayudó a dar un pequeño giro al encuentro metiendo un ritmo acelerado y anotando. A punto estuvieron de empatar el partido, pero lejos de eso, el Sinfín metió quinta y dejó a los suyos al descanso tres arriba (18-15).

Una mejor segunda parte

Tras pasar por el túnel de vestuarios, el Cisne arrancó con una idea similar a la que dejó en la primera parte, pero la combinación entre Furtado y Arias ayudó a equilibrar el resultado. Se distanciaron los locales hasta que el Cisne empezó la escalada y en la medianía logró ponerse por delante por primera vez en todo el partido. Ese gol de ventaja apenas duró, pero significó un cambio en el ritmo del partido.

Los fallos en defensa devolvieron el poder a los locales que se alejaban de la posibilidad de salvar un punto. Tuvieron la oportunidad de recortar, pero el portero estaba acertado y dos errores complicaron los últimos compases.

A un par de minutos del final, el marcador estaba en 32-31 y el portero blanco frenó la ofensiva cántabra. Quedaban diez segundos y la posesión para el Cisne. Furtado tenía en sus manos el empate, pero estrelló su lanzamiento contra el portero y dejó al Cisne sin un punto que peleó en la recta final.