Luz verde al informe ambiental que permitirá licitar el tramo A Ermida-Pilarteiros de la A-57

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Visita a las obras del tramo Vilaboa-A Ermida de la A-57 en octubre del año pasado
Visita a las obras del tramo Vilaboa-A Ermida de la A-57 en octubre del año pasado Ramón Leiro

El BOE publicó el estudio, que se decanta por la alternativa de trazado más próxima al casco urbano de Pontevedra

27 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La A-57, futura circunvalación de Pontevedra, avanza un paso más tras publicarse este viernes en el Boletín Oficial de Estado (BOE) el informe de impacto ambiental del tramo A Ermida-Pilarteiros. Se trata de un tramo de apenas cinco kilómetros que comunicará ambos puntos de Marcón y Xeve, respectivamente, y la alternativa elegida de las dos analizadas es la que discurre más próxima al casco urbano de la ciudad del Lérez.

Esta alternativa la número 1, presenta, según especifica el informe, menos efectos negativos tanto desde el punto de vista ambiental, como económico, territorial y funcional. Se añade en el documento que las principales ventajas de esta alternativa son una menor longitud de trazado, que los viaductos previstos son «menos complejos», que no discurre en paralelo a ningún cauce, que presenta un «menor impacto visual», y que la mayor proximidad de la traza al núcleo urbano de Pontevedra en el enlace de la N-541 permite captar mayores tráficos para realizar movimientos periurbanos.

Afectará en mayor o menor media a los núcleos de población de A Cardosa, Corval, O Teso, Leirados, A Ermida, Pilarteiros, Xamín, O Quinteiro, As Pontes y Carabelos.

Dos o tres carriles

El futuro vial estará diseñado para velocidades de un máximo de 100 kilómetros por hora, dos carriles de circulación y el ancho de la calzada oscilará entre los 7 y los 10.5 metros. Esta diferencia se debe a que en algunos tramos habrá un carril adicional.

Se prevé la construcción de tres viaductos: sobre el Rego de Cardosa, sobre el Rego de Xanín y el tercero sobre el río Lérez. Este último será el de mayor complejidad, pues tendrá una longitud de 735 metros. Los viaductos servirán «para salvar depresiones del terreno y facilitar la integración paisajística, así como para minimizar la afección a edificaciones»

La publicación del estudio de impacto ambiental supone un avance importante para la licitación del proyecto, que será el que determinará con exactitud las afecciones concretas a propiedades privadas o bienes naturales o patrimoniales.

En la actualidad se encuentra en fase de ejecución el tramo de la A-57 entre Vilaboa y A Ermida. La primera piedra se puso en el año 2015. Además, el tramo Pilarteiros-Barro y su conexión con AP-9 en Curro tiene declaración de impacto ambiental desde julio del 2017.