Conchín Abellás: «La enfermería es el vértice de la asistencia sanitaria en nuestro país»
PONTEVEDRA
La nueva directora de Enfermería del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés es una apasionada de la formación y subraya que hay que fidelizar al personal
23 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.María Concepción Abellás Álvarez (Tui, 1973), Conchín para todos los que la conocen, lleva un mes y medio como nueva directora de Enfermería del área sanitaria. Confiesa que dejar su puesto como supervisora de urgencias en el Hospital do Salnés no fue una decisión fácil. Representa a unos 2.500 profesionales que juegan un papel fundamental en el día a día y son el «vértice de la asistencia sanitaria».
—¿Cómo ha sido el aterrizaje en el puesto directivo?
—Llevo desde finales de febrero con un nombramiento un poco urgente, como llamamos. Juan [Vázquez, su antecesor] se había ido, el gerente habló conmigo y me tomé un tiempito.
—¿Le costó tomar la decisión?
—Imagínate. Vengo de llevar 22 años gestionando un servicio de urgencias, no es un tema nuevo en parte en lo que se refiere a gestión, pero es multiplicar por un montón. No es lo mismo un servicio, que ser la directora de Enfermería de toda el área. Siempre hay que pensar y me costó mucho porque O Salnés es mi segunda casa. No es solo tu lugar de trabajo, al final se convierte en tu segunda casa porque son más horas allí que en tu propia casa. Tienes un sentido como de permanencia y de compromiso con el sitio donde has trabajado tanto tiempo y con la gente maravillosa que está allí. Trabajar con José Flores [el gerente] es un privilegio y ya somos conocidos de otras batallas. Él trabajó con nosotros como médico asistencial en el servicio de urgencias y fuimos compañeros en la dirección de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes). Somos viejos conocidos tanto en la parte asistencial como en la de gestión.
—Su trayectoria está muy ligada a urgencias y la formación en triaje o grupos de los códigos ictus, sepsis o sigur. ¿Fue vocación?
—Soy una apasionada de la formación en el campo en el que más he trabajado, que es urgencias. Soy la persona que he implantado los servicios de triaje en los hospitales gallegos y otros a nivel nacional y cursos de formación. En la profesión, como enfermera, ya no haces solo formación exclusivamente a compañeros, sino que lleva inmersa una educación para la salud que hay que hacer siempre y en todo momento al paciente. Es algo que a mí me gusta y es fundamental la formación a profesionales y en mi parte, a la enfermería.
—De usted dependen unos 2.500 profesionales de enfermería. ¿Con qué objetivos o retos llega?
—Hay muchos y en frentes muy abiertos. El reto importantísimo a nivel de área es el nuevo hospital que va unificar los servicios de la parte hospitalaria, los dos de Pontevedra y también el de O Salnés. Ahora somos tres hospitales que tenemos que trabajar y vernos de una manera integrada. A nivel hospitalario supondrá un montón de mejoras y cosas que se van a continuar que ya se habían iniciado. El objetivo es que la gente que trabaja en esta área esté contenta. Si el profesional está contento trabajando eso repercute sí o sí en la calidad asistencial que nosotros vayamos a dar a nuestros pacientes, a nuestra población de referencia. A nivel de primaria, son sabidos los inconvenientes que ha habido estos últimos meses de coberturas, de falta de profesionales, tanto médicos como enfermeros. Sí que ha repercutido en gran manera a la parte de enfermería porque creo que somos el vértice de la asistencia sanitaria que tenemos en nuestro país y a la gente la tienes que fidelizar y tener contenta.
—La pandemia puso si cabe más en el foco a la enfermería. Es una profesión autónoma, pero hay quien piensa que está subordinada al médico. ¿Qué opina?
—Soy una fiel defensora y no concibo una asistencia sanitaria si no se trabaja en equipo. A lo mejor, por mi formación en urgencias, el equipo médico, enfermero, auxiliar, celador, administrativo es un equipo multidisciplinar donde cada uno tiene su función, pero siempre está interrelacionada. Cuando doy los cursos de formación siempre pongo un ejemplo: en las carreras de fórmula 1 de repente ves que llegan los coches a boxes y todo el mundo está ahí, cómo pueden conseguir que en cinco segundos al coche le hayan cambiado una rueda, echado el repostaje de gasolina y salido a doscientos por hora. Es un engranaje, todo el mundo tiene su función y sabe lo que tiene que hacer. Cuando falla uno, el equipo falla, da igual quien sea. Si no se entiende de esta manera no se llega a un objetivo común y una asistencia de calidad como es la que queremos dar.
«En urgencias de O Salnés no hay pacientes en pasillos»
Conchín Abellás afirma que uno de sus objetivos es hacer mejoras en la parte de recursos humanos «con contratos más largos y fidelizar a la gente». Asegura que faltan enfermeras y que una medida puede ser ampliar las plazas de las escuelas universitarias: «Las que están saliendo no dan cobertura a las necesidades que tenemos. Puede ser una vía».
—En los PAC hubo problemas de cobertura y al no haber médico se reforzó enfermería. Hubo quejas. ¿Las entiende?
—Era una medida obligada porque tú lo que no puedes es cerrar un PAC. La enfermera es un profesional sanitario con un alto grado de independencia. Tengo formación, a lo mejor no puedo hacer una receta de determinado fármaco, pero sí puedo atender en un PAC una parada cardiorrespiratoria. Por supuesto que entiendo los temores, pero de cara a qué se está trabajando. Estamos empezando en España, pero en otros países se ha hecho hace tiempo. Te pongo el ejemplo de los SVAE [soporte vital avanzado de enfermería] del 061, lo que tenemos que darle es la formación para que puedan dar la atención sanitaria porque el PAC también puede quedarse sin médico por una salida, o un accidente con más víctimas de las que puedes dar cobertura. Enfermería es una profesión maravillosa y que está preparada para dar determinada cobertura y asistencia urgente aunque no sea lo deseable, que siempre es que exista un equipo. El malestar hay que entenderlo, pero hay derivaciones si no se puede dar la atención completa.
—Conoce las carencias de espacio en urgencias de Montecelo. ¿Las resolverá el nuevo hospital?
—Estos servicios son el primer contacto que tiene el paciente con la asistencia urgente. Tienen que estar muy bien estructurados y tener unos circuitos bien establecidos. Hay paciente adulto, pediátrico, con necesidades especiales, y eso tiene que estar definido. He estado al frente del servicio de urgencias en O Salnés, junto con Tato Vázquez, una de las personas que más sabe de urgencias, de su organización, y casi todo está inventado pero hay que ponerlo en práctica. Urgencias de O Salnés es un referente a nivel gallego y fuera y no hay pacientes en los pasillos. El nuevo hospital va a ser un beneficio para los profesionales y los pacientes.