Tres años de prisión por una partida de hachís y cocaína incautada en el peaje de la AP-9 en Caldas

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

GUARDIA CIVIL

Solo uno de los cuatro ocupantes del turismo interceptado en el 2019 en Caldas fue condenado en la Audiencia de Pontevedra

29 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

De nuevo, un acuerdo de conformidad entre la Fiscalía y acusados de narcotráfico a pequeña escala ha servido para cerrar un operativo policial contra la distribución de estupefacientes en la comarca de Pontevedra. En esta ocasión, el único procesado por una partida de hachís y cocaína intervenida en el entorno del peaje de la AP-9 a su paso por Caldas de Reis, un vecino de Santiago, aceptó en la Audiencia tres años de prisión y el pago de una multa de 8.200 euros.

La interceptación de esta persona se produjo en la noche del 7 de agosto del 2019 cuando agentes de la Guardia Civil de Vilagarcía de Arousa comisionados para un servicio de seguridad ciudadana dieron el alto al BMW X-3, en el que viajaba en el asiento trasero, cuando se disponía a salir de la autopista por el peaje de Saiar. De este modo, y «con ánimo de destinarla después a la venta o a la distribución entre terceras personas», ocultaba bajo sus ropas la droga.

En concreto, portaba una bolsa translúcida y envasada al vacío que contenía veinte bellotas de hachís que sumaban un peso de algo más doscientos gramos, así como otros veinticuatro gramos de cocaína con un grado de pureza del 80,75 %, cantidad que debidamente cortada podría dividirse en 250 dosis, según el instituto armado. La sentencia refiere que, al recibir el alto, el investigado se bajó rápidamente del turismo y arrojó a la cuneta la bolsa, «la cual recogieron casi inmediatamente los agentes de la Guardia Civil que efectuaron el control de seguridad ciudadana».

Además, se recoge que los guardias sometieron al resto de ocupantes del coche a un cacheo posterior, lo que permitió el decomiso al conductor de una bellota de hachís de diez gramos y a quien también iba en los asientos traseros dos gramos de esta misma sustancia estupefaciente. En ambos casos se les tramitó un acta administrativa de infracción por la tenencia o el consumo de estupefacientes en la vía pública.

En su momento, la Guardia Civil confirmó que se detuvo a los cuatro ocupantes del BMW X3, todos ellos vecinos de Santiago de Compostela y con edades comprendidas entre los 20 y los 27 años. Todos ellos quedaron en libertad a las pocas horas, en la madrugada del 8 de agosto, en sede policial tras haber concluido la instrucción de las diligencias.

Coche sin decomisar

Finalmente, solo uno de los arrestados fue condenado. En su caso, se reconoce que «es un consumidor habitual de drogas tóxicas, en concreto cocaína y hachís, si bien este consumo no repercute en una disminución de sus facultades intelectivas y volitivas». En este punto, se recoge la suspensión de la ejecución de la pena de prisión a condición de que no delinca en tres años y se someta a tratamiento de deshabituación.

La sentencia establece, por otro lado, que no procede el decomiso del vehículo al haberse sobreseído la causa sobre quien ocupaba el asiento del copiloto.