Localizan bajo tierra en Pontevedra los vestigios del tercer lateral del claustro de Santa Clara

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

DIPUTACIÓN DE PONTEVEDRA

En la actualidad solo se conservan dos laterales, aunque en su origen hubo un tercero, que fue derruido y ahora localizado

24 sep 2022 . Actualizado a las 13:47 h.

Cuando apenas resta menos de una semana para que concluyan las excavaciones en el convento de Santa Clara, los hallazgos se sigue sucediendo. De hecho, este viernes, César Mosquera, vicepresidente de la Diputación de Pontevedra, anunció, entre otras novedades, la localización del tercer lateral del claustro.

Explicó que en la actualidad solo se conservan dos de los laterales, si bien los nuevos descubrimientos ponen de manifiesto que el claustro estaba en su origen cerrado por tres lados. Los dos existentes y un tercero en su zona oeste que fue derruido, aunque bajo tierra se encontraron pavimentos empedrados y en la zona exterior «restos dun tellado que voaba sobre o xardín da fonte e tamén cicatrices do enlace coa edificación», precisaron desde la Diputación.

Esto resuelve uno de los enigmas vinculados a la singularidad del claustro, «diferente aos doutras construcións relixiosas que, de maneira xenérica, pechaban con catro corredores de galerías unha zona central axardinada». En todo caso, desde la Diputación añadieron que «nas sondaxes (...) non se encontraron evidencias de que o cuarto lateral fose construído, o que leva á equipa arqueolóxica a pensar que o claustro foi o enésimo proxecto a medio finalizar do convento. O seu deseño orixinal, así pois, sería en forma de U con dúas alas simétricas en dirección sur».

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Saeteras en un muro

Mientras un enigma parece que va camino de resolverse, surge uno nuevo. Y es que este no fue el único hallazgo reciente del que dio cuenta César Mosquera, toda vez que los estudios de paramentos, revelaron en el muro interior paralelo al de Barcelos —separa la zona de vides de la parte exterior de arbolado— una serie de «ventanucos abucinados similares ás saeteras».

Si bien no se puede determinar si fueron construidas o no por las monjas de Santa Clara o si lo fueron antes, Mosquera aludió a que muy probablemente tenían un carácter defensivo. A fin de cuentas, «a parte externa é estreita e a interna máis larga», señalaron desde la Diputación precisaron que estas «aperturas están, a día de hoxe, colmatadas e recheas de pedras».