La Xunta asumirá en Pontevedra la Escola de Cantería y la Finca de Lourizán

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

ADRIÁN BAÚLDE

Acuerdo con la Diputación para iniciar el proceso de cambio de titularidad

06 jul 2022 . Actualizado a las 12:30 h.

Un día histórico. Así lo dejaron entrever este martes el vicepresidente segundo y conselleiro de Presidencia, Diego Calvo, y la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, al rubricar el protocolo general para la transmisión de la Finca de Lourizán y la Escola de Cantería de Poio. «Estamos —sinalou Silva— falando dun acordo de transferencias entre institucións que foron capaces de sentarse e traballar conxuntamente para poder garantirlle un gran futuro» a ambas infraestructuras. «Hoxe é un día importante e especial para a provincia e para Galicia», añadió.

De este modo, se va formalizando lo acordado en un reunión celebrada hace cinco años, en el 2017, en la que se formularon «diferentes cuestións entre as que se atopaban a necesidade de comezar a falar de moitos servizos que esta institución provincial prestaba e que nós críamos que era necesario estudar a posible transferencia», precisó la presidenta de la Diputación.

En el texto, según refieren desde la Xunta, se establece que se impulsarán los instrumentos jurídicos «máis axeitados para levar a cabo a cesión». Esta incluirá, en todo caso, «os recursos persoais e materiais precisos para a actividade que desenvolven ambos centros», si bien «as instalacións poderán utilizarse para fins de uso xeral ou servizo público».

La intención es que este «compromiso» sea una realidad en el 2023, de tal modo que ahora se iniciará el correspondiente procedimiento administrativo que desembocará en el cambio de titularidad. Será a partir de entonces que la Xunta podrá acometer, a través de las consellerías de Educación y de Medio Rural, una serie de proyectos en ambos espacios.

En el supuesto concreto del Pazo de Lourizán, Diego Calvo reseñó que se va a trabajar «na recuperación dun espazo de alto valor histórico e natural». A día de hoy, ambas administraciones mantienen un convenio en el que se concreta que la Xunta desenvuelva en este entorno diferentes actividades relacionadas con la política medioambiental e forestal. Con su transferencia, expuso Carmela Silva, «garántese que teña un proxecto de futuro máis ambicioso, sobre todo neste momento onde o mundo ten que ir da man da aposta polo medio ambiente un modelo sostible».

En todo caso, no hay que olvidar que el mantenimiento del Pazo de Lourizán fue foco de polémica entre Xunta y Diputación hasta el punto que se tuvo que acudir a los tribunales. El pasado febrero, el TSXG falló a favor de la segunda de estas administraciones concluyendo que la Xunta de Galicia «está obrigada a realizar as obras» de rehabilitación del histórico inmueble.

Enseñanzas de FP

Por su parte, en el caso de la Escola de Cantería de Poio, desde el Gobierno autonómico precisaron «que co traspaso da súa titularidade impulsaranse as ensinanzas de Formación Profesional na provincia de Pontevedra para darlles resposta ás necesidades do alumnado e empresas». Por lo pronto, la Consellería de Educación tiene previsto analizar las instalaciones y los posibles ciclos a implantar, «tras consultar ao empresariado do sector e avaliar a demanda». Esta medida, según inciden, refuerza «a aposta do Goberno galego por estas ensinanzas, garantía de emprego e de profesionalización».

El objetivo pasa por «potenciar os estudos da familia profesional das industrias extractivas, ámbito de especial transcendencia para o patrimonio e o sector da construción, e cunha elevada demanda en Galicia», añadieron.

Carmela Silva aludió a la «longa tradición e enorme futuro nun oficio que tanta pegada ten en Galicia». Asimismo, reconoció que los alumnos y profesionales vinculados con este centro «levan moito tempo reclamando unha formación profesional regrada e a única posibilidade de que sexa realidade é a través da xestión da Xunta de Galicia».

Un convenio fruto de meses de negociaciones llevadas «con total discreción»

En sus respectivas intervenciones, tanto Carmela Silva como Diego Calvo destacaron el papel del personal técnico y político implicado en una negociación que fructificó en el protocolo suscrito este martes: «Levan meses traballando para que saia adiante con total discreción», subrayó la presidenta de la Diputación.

En este sentido, realizaron un reconocimiento especial al conselleiro de Educación, Román Rodríguez, y al vicepresidente de la Diputación, César Mosquera, «que iniciaron as conversas para estudar estas dúas posibles transferencias», en palabras de Carmela Silva. Este agradecimiento se extendió a distinto personal de las dos administraciones.

La presidenta de la Diputación anunció que se mantuvo una reunión con la directiva de la comunidad de montes en cuyos terrenos, cedidos, se asienta la Escola de Cantería. Los comuneros, en principio, mostraron «a súa total conformidade con este paso que estamos a dar». Asimismo, confirmó que se informará a sindicatos y trabajadores de este centro situado en Poio de todo lo relativo a este protocolo, «xa que queremos que todas as persoas e institucións implicadas teñan toda a información do proceso», acotó Carmela Silva.

Diego Calvo, por su parte, dejó claro que el protocolo se refiere a «dous activos importantes da sociedade pontevedresa». Tanto el conselleiro de Presidencia como la presidenta de la Diputación dejaron para el futuro el debate sobre el posible traspaso de otros organismos —Areeiro, Moriscade, la Escola de Enfermería, Príncipe Felipe o Museo de Pontevedra— cuyas competencias la Diputación entiende que «son exclusivas da Xunta».