Detenido en Pontevedra tras obligar a una mujer con dos niños a ayudarle a huir de la policía

Alfredo López Penide
López PEnide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

GUARDIA CIVIL

La Guardia Civil sorprendió al ladrón en la terraza de un restaurante de Cerdedo-Cotobade

21 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

En los últimos días, agentes de la Guardia Civil de Pontevedra detuvieron a quien no dudaron en calificar como «un peligroso y escurridizo delincuente especializado en los robos de coches». Se trata de un hombre de 42 años, con un amplio historial de antecedentes por hechos violentos, que carece de domicilio fijo en la provincia y que, presuntamente, no duda en acudir a la violencia, ya sea para conseguir sus objetivos como para evadirse de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

Tras su arresto y puesta a disposición judicial en el edificio de los juzgados de A Parda, el magistrado titular de Instrucción número dos de Pontevedra decretó su ingreso en el centro penitenciario de A Lama. De este modo, se puso fin a una serie de episodios delictivos que comprenderían, supuestamente, una docena de robos ocurridos en los últimos meses en distintas localidades de las Rías Baixas, así como en otras provincias españolas y en Portugal. Las investigaciones se iniciaron a finales de marzo tras producirse la sustracción de un vehículo municipal, un Renault Clio, propiedad del Concello de Nigrán. Poco se imaginaban que era el comienzo de una paulatina escalada delictiva en la que el sospechoso terminaría encadenando hasta una veintena de cargos penales.

Se da la circunstancia de que, en las proximidades del lugar donde se produjo este robo, se recuperó a los pocos días un Audi-A4 que figuraba como sustraído en Ávila. En el interior del vehículo, los guardias del área de investigación del puesto de Baiona-Nigrán aislaron «huellas dactilares y efectos personales de la misma persona», además de que se pudo comprobar que el 8 de marzo se había intentado vender el Renault-Clio en Sevilla.

La transacción no fructificó porque el comprador se enteró de que el vehículo constaba como robado. Al verse descubierto, el vendedor no dudó en intentar agredir a su interlocutor con un cuchillo de considerables dimensiones.

Una madre y sus dos hijos

Desde la Comandancia de Pontevedra reseñaron que se produjo entonces uno de os incidentes «más graves» con los que se le vincula al sospechoso. Y es que, temiendo la llegada de la policía, se introdujo en un Dacia de color blanco que estaba parado y amenazó a la conductora con el cuchillo para que reiniciase la marcha. «En los asientos traseros, iban dos menores de 4 y 6 años», añadieron, al tiempo que rememoraron cómo, en un momento dado, el detenido se dirigió a la víctima para que detuviese el turismo «para dejar a los niños en la calle y que vuelva a subir para ayudarlo a salir de la zona».

Sin embargo, en ese preciso instante, la llegada de una patrulla de la Policía Nacional lo pilló por sorpresa, por lo que tuvo que continuar la huida por su cuenta, sin que lograsen alcanzarlo.

La Guardia Civil logró trazar el recorrido seguido por el ladrón, un itinerario que lo llevó hasta una gasolinera de Alcalá de Guadaíra, donde realizó un repostaje que no abonó, así como a la localidad pontevedresa de Baiona. En esta población se le atribuye un robo en la vivienda de la madre de su expareja, donde se había alojado durante unos días, si bien la mayor parte del botín, incluida «una importante colección libros de ediciones limitadas, relojes, plumas y joyas», fue recuperado en el domicilio de un familiar del arrestado en la ciudad de Pontevedra.

Una semana después, el equipo de investigación interceptó un turismo en la parroquia pontevedresa de Tomeza. La reacción del sospechoso fue tan imprevista, como violenta, ya que roció con un aerosol los ojos de uno de los agentes cuando trataba de identificarlo, circunstancia que posibilitó que se diese a la fuga campo a través.

Intento de atropello

Dentro del coche se hallaron un casco de motorista y el contrato de compraventa de una motocicleta suscrito en Salamanca con una identidad falsa, ciudad donde se recuperó el Dacia sustraído en Sevilla.

De igual modo se le relaciona con el intento de atropello de los agentes que pretendían detenerlo el pasado 30 de abril cuando fue localizado en Ourense a los mandos de una motocicleta de alta cilindrada. Días después, el 13 de mayo, se consumó su arresto en Cerdedo-Cotobade, una detención en la que el pontevedrés no opuso resistencia alguna. Lo interceptaron cuando degustaba unas consumiciones en la terraza de un restaurante y se le intervinieron en un bolsillo un aerosol de pimienta, así como uno de los relojes sustraídos en Baiona.

Además, en su cartera, llevaba los permisos de conducir y las tarjetas sanitarias de dos personas, con los que solía identificarse. Además, en las cercanías del local se encontraba estacionado un Volkswagen Golf que sustrajo días antes en Ourense.

Los agentes comprobaron que portaba unas placas de matrícula dobladas, esto es, que pertenecía a otro vehículo, concretamente de un Renault-Laguna que fueron sustraídas en Portugal. Desde la Comandancia destacaron el hecho de que «llamó especialmente la atención que en la guantera del vehículo portaba también un cuchillo de considerables dimensiones».

Se le atribuye la autoría de una docena de robos con fuerza en automóviles ocurridos en varias provincias españolas, así como en Portugal, pero también los delitos de detención ilegal, atentado, resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad, usurpación de estado civil, amenazas, falsificación de documento público y apropiación indebida. En el caso de los robos en vehículos, estos se produjeron en la ciudad de Pontevedra, A Estrada y Nigrán, pero también en Ourense, Sevilla, Ávila, Cuenca, Salamanca y Portugal.