La familia depositó ayer sus cenizas junto a las de Vallejo, otro histórico jugador de esa quinta de oro
06 may 2022 . Actualizado a las 11:39 h.Eduardo Lis Pena, Cholo, ya descansa en uno de los lugares donde fue feliz. El eterno capitán del Pontevedra CF y su presidente de honor vivirá para siempre en la memoria de los granates y desde ayer sus cenizas descansan bajo el césped de Pasarón. Su familia, acompañada de la presidenta del club, Lupe Murillo, enterraron sus restos en el centro del campo donde Cholo vivió tantas tardes de gloria y a donde acudía cada fin de semana. El capitán del Hai que roelo falleció el pasado 27 de marzo a los 88 años de edad. Con su adiós, el Pontevedra CF perdía un símbolo, una leyenda que hizo grande al club en la década de los sesenta. Su fallecimiento dejó un vacío en el club por el que se desvivía y que acuñó el apodo de Hai que roelo después de derrotar en Pasarón al Real Madrid y Barcelona. La gesta de esa quinta de oro se hizo eterna y sigue marcando la vida del conjunto granate.
Desde que dejó el fútbol activo, Cholo siempre vivió ligado al Pontevedra CF y en el año 2011, en el marco de los actos de celebración del 70 aniversario de la fundación del club, fue nombrado presidente de honor. El día de su muerte, el equipo le rindió en Pasarón un emotivo minuto de silencio y el equipo venció por 3-2 al Unión Adarve. La presidenta dedicó la victoria a Cholo y aseguró que desde donde estuviera los estaba apoyando.
Sus cenizas descansan para siempre bajo el terreno de juego. Y lo hace cerca de Vallejo, otro de los jugadores del Hai que roelo que junto a Cholo escribió las mejores páginas del Pontevedra CF. Por expreso deseo del jugador, sus cenizas fueron depositadas en marzo del 2008 en el estadio de Pasarón. Tras la ceremonia religiosa, que ese 29 de marzo ofició el sacerdote Luis Alcántara, el hijo de Vallejo enterró sus restos en el centro del campo. A pesar de la remodelación del estadio, sus cenizas siguen viviendo para siempre en Pasarón.
Dos leyendas del granatismo se hacen eternas bajo el césped de Pasarón.