Cuando las planeadoras del narco se fabrican fuera de Galicia

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Ramón Leiro

La Audiencia de Pontevedra mantiene la prisión provisional para los lancheros de Vilaboa

18 abr 2022 . Actualizado a las 04:50 h.

Una reciente operación de la Guardia Civil ha puesto de manifiesto que no todas las planeadoras empleadas por los clanes de la droga de Pontevedra y, por extensión, de Galicia son de manufactura autóctona. Y es que los habitual es que las organizaciones asentadas en las Rías Baixas tuvieran como modelo dos tipos de «negocio» a la hora de fabricar sus lanchas rápidas. Uno en el que las propias redes de narcos disponen y construyen sus embarcaciones —el caso más paradigmático sería el de Rafael Bugallo Piñeiro, O Mulo, uno de cuyos compinches acaba de ver como le rebajan la condena por los 1.245 kilos de cocaína del Coral I— y otro en el que se acude a organizaciones asentadas en la propia provincia, en el norte de Portugal o en otros puntos de la comunidad que son las que surten a los entramados de estas planeadoras. De hecho, a principios de mes, se desarrolló un operativo que se saldó con una decena de arrestos vinculados a lo que se sospecha es una organización especializada en construir narcolanchas que, posteriormente, venderían a otras redes para alijar partidas de drogas en la comunidad, en el vecino país o en otros puntos del territorio nacional, como el estrecho de Gibraltar.

Sin embargo, a mediados de la Semana Santa, la Guardia Civil llevó a cabo sendos operativos, bautizados como Maius y Drift, que han supuesto «la desarticulación de dos organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico en la Costa Dorada» que se habían especializado en facilitar «la botadura de narcolanchas» a otros entramados delictivos. En total, fueron arrestadas medio centenar de personas y se intervinieron diez toneladas de hachís y una decena de embarcaciones, un material aprehendido que se calcula puede tener un valor cercano a los 30 millones de euros.

En ambos casos, los investigadores policiales hallaron vínculos con Galicia, pero, a priori, en sentido contrapuesto. Así, la operación Maius se centró en una red asentada en el Delta del Ebro dedicada a facilitar a otras organizaciones la botadura de estas lanchas. Los sospechosos operaban como si fueran «una empresa de servicios y logística», de tal modo que la Guardia Civil confirmó que sus «servicios eran requeridos por organizaciones asentadas en todo el territorio nacional, detectándose vínculos con organizaciones de Portugal, Galicia, Andalucía, Extremadura y Cataluña».

Por su parte, en el marco de Drift, se arresto «al considerado como el mayor responsable del tráfico de hachís en Cataluña durante el último año», ya que se sospecha que tenía «la capacidad de introducir hachís en España y enviar posteriormente la droga a otros países europeos». En su caso, «la organización adquiría sus embarcaciones en Galicia y Portugal», confirmaron desde el instituto armado.

Arrestados en Vilaboa

Estas investigaciones prácticamente han coincidido en el tiempo con la decisión de la Audiencia de Pontevedra de confirmar la situación de prisión provisional decretada contra dos supuestos lancheros detenidos a mediados del pasado febrero cuando, presumiblemente, pretendían fletar una planeadora en el puerto de Santa Cristina de Cobres, en el municipio de Vilaboa. Se les investiga penalmente por un supuesto delito de contrabando.

La resolución ahonda en el hecho de que «el riesgo de fuga existe y es grave». En este sentido, se incide en que los hechos que se investigan sustenta «el lógico deseo de huida ante la amenaza de una pena grave de prisión, sin que, en este momento, los lazos familiares y de trabajo que se esgrimen aparezcan con la suficiente solidez para descartar dicho riesgo».

Además, se remarca que concurre el riesgo de reiteración delictiva, así como que, dado el estado tan inicial de la investigación, existe «el riesgo de ocultación de fuentes de prueba». Es por ello que «su libertad pueda perjudicar el esclarecimiento» de los hechos que trata de esclarecer la Guardia Civil.