Con empate a 28 los blancos desperdiciaron su última posesión para ponerse por delante y el Málaga, muy serio durante todo el encuentro, anotó la suya por medio de Guilherme a falta de 1 segundo para el final.
Fue entonces cuando surgió la acción de la polémica. El Cisne trató de sacar de centro lo más rápido posible y los colegiados señalaron la infracción del Málaga por la invasión del círculo central en el momento del saque. El reglamento es claro: siete metros y expulsión. Álex Chan no falló desde el punto de penalti y regaló el empate al Cisne en medio de las fundadas protestas locales, que reclamaron que la acción estaba fuera de tiempo y no se produjo dentro de la zona de infracción.