Yuliia Rysevich, ucraniana en Pontevedra: «En mi ciudad ya hubo un bombardeo y la gente huye a Polonia»

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Yuliia Rysevich, en una foto de archivo, es natural de Ucrania y reside en Pontevedra desde hace once años.
Yuliia Rysevich, en una foto de archivo, es natural de Ucrania y reside en Pontevedra desde hace once años. RAMON LEIRO

Sus padres, hermanos y abuelos permanecen en casa, sin ir a trabajar ni a los colegios en  Ivano-Frankivsk, donde bombardearon el aeródromo militar

24 feb 2022 . Actualizado a las 14:13 h.

Hace justo un mes, Yuliia Rysevhic, una ucraniana que vive en Pontevedra, decía que era consciente de la amenaza que se cernía sobre su país y del temor existente a una guerra con Rusia, pero respiraba tranquila por su familia.Así, indicaba que sus padres, abuelos o hermanos residen en una ciudad del occidente de Ucrania llamada Ivano-Frankivsk, de más de 200.000 habitantes, que está alejada de la frontera rusa, de ahí su tranquilidad. Pero, treinta días después y con Rusia atacando toda Ucrania, ya no hay rastro de calma en la voz de esta mujer. Desde su ciudad de acogida, la urbe del Lérez, indica: «Estamos nerviosos, cómo no vamos a estarlo. Estoy trabajando y no veo las noticias todo el rato, pero aún así es preocupante y lo llevas como lo llevas, con nervios», indica. 

Dice que desde esta madrugada trató de contactar con su familia. Hay problemas con la cobertura de los móviles porque «todo el mundo está intentando hablar por teléfono». Pero ella pudo conversar con los suyos a través de Internet, que de momento no falla. Le dijeron que permanecen en casa, sin ir a trabajar ni a los colegios. «En mi ciudad mucha gente trata de huir a Polonia, los que tienen familia allí lo hacen, porque estamos cerca de ese país. Bombardearon el aeródromo militar, no hay víctimas civiles, por lo que me dijeron», explica. Su familia, de momento, no intentará salir del país. «Están en casa todos», insiste ella.  

Yuliia confiesa que nunca pensó que podría pasar algo así, ni siquiera en los últimos meses, cuando la amenaza rusa era cada vez mayor. «Siempre pensé que en la frontera con Rusia podía haber algo, pero no una guerra en todo el país», dice. Sin lograr creerse del todo lo que está ocurriendo desde que Putin ordenó los bombardeos, señala que pese a estar más segura en España le gustaría permanecer allí, con los suyos. «Es lo que quieres en estos momentos, pero me temo que no va a poder ser. Tenía un billete para ir esta primavera, no sé lo que pasará, pero supongo que me lo cancelarán», remacha.