Dada la relación que tenían y que se había fraguado en anteriores promociones, los integrantes de Al Fondo Hay Sitio confiaron en su prestigio profesional y procedieron a realizarle una transferencia de 570 euros creyendo que «iban a recibir cuatrocientas copias de su disco, cosa que evidentemente no ocurrió». De hecho, los magistrados sostienen que no realizó «ninguna gestión para encargar las copias del disco e hizo suyos los 570 euros».
Tras reseñar que «los perjudicados han renunciado a la indemnización que les corresponde con motivo de los hechos», la Audiencia de Pontevedra confirma los seis meses de prisión impuestos al encausado como autor de un delito de estafa. En su resolución se desestiman los argumentos de la defensa conforme a que no se habrían dado los requisitos de este delito o que las pruebas no eran suficientes para enervar la presunción de inocencia, así como se avalan los mensajes de WhatsApp intercambiados: «No hay ni el más mínimo indicio de que esos mensajes hayan sido falseados».