El fiscal, implacable con un caso de abusos a una menor en Pontevedra: mantiene la petición de casi 16 años de cárcel

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Feministas de Pontevedra se manifestaron esta mañana para dar apoyo a la víctima del juicio de abusos sexuales y a su madre
Feministas de Pontevedra se manifestaron esta mañana para dar apoyo a la víctima del juicio de abusos sexuales y a su madre CAPOTILLO

El acusado era el padrastro de la víctima, a la que crio desde pequeña y a la que iba a adoptar. Un grupo de feministas le esperaba a las puertas de la Audiencia

14 oct 2021 . Actualizado a las 19:30 h.

La Audiencia de Pontevedra dio cabida hoy a la segunda y última sesión de un juicio  en el que un expadrastro se sienta en el banquillo acusado de haber abusado sexualmente de la que era su hijastra, que entonces era menor de edad. El fiscal se mostró implacable y, tras la vista, decidió mantener la pena que inicialmente solicitaba para el acusado: 15 años y nueve meses de prisión más una orden de alejamiento de la víctima con una duración de 24 años.

De momento, y a la espera de que haya sentencia, el hombre está libre y ni siquiera tiene orden de alejamiento de la víctima, que desde que puso la denuncia tuvo que cruzárselo en numerosas ocasiones. 

Sobre las nueve y media de la mañana, el ruido ensordecedor de unos tambores alertaron a los vecinos de la calle Rosalía de Castro, donde se ubica Audiencia Provincial de Pontevedra. Portando camisetas lilas, varias feministas se concentraron ante la sede judicial para dar apoyo a la víctima del juicio de abusos sexuales que iba a celebrarse en la sección segunda de la Audiencia. La joven no llegó a pararse ante la concentración. Pero sí lo hizo su madre, que agradeció el apoyo recibido y señaló: «La pesadilla que hemos pasado no se la deseo a nadie. Ahora, espero que haya justicia para mi hija»

A las diez de la mañana, se puso en marcha el juicio. La vista, en realidad, ya tuvo una primera sesión hace unos días. Pero hubo que retomarla porque faltaban algunas diligencias. En el banquillo, nuevamente, el expadrastro de una joven, al que se le acusa de varios delitos de abusos sexuales, cometidos cuando ella era una adolescente menor de edad. Entre los episodios que se le imputan está uno en el que, según el relato del fiscal, el acusado masturbó a la menor «y le practicó sexo oral metiéndole la lengua en la vagina». La defensa de este hombre, que no reconoció la autoría de los hechos cuando le tocó declarar en la primera sesión del juicio, hoy presentó una prueba pericial. Es decir, contó con una psicóloga para tratar de dar credibilidad a su versión de que no cometió los delitos que se le imputan. 

Pero de poco le valió, de momento, la intervención de ese perito. El fiscal, tras el juicio, decidió mantener las mismas penas que inicialmente pedía para el acusado. Es decir, casi 16 años de prisión. La acusación particular, ejercida por la abogada Sonia Castelo, se sumó a esta misma petición del fiscal, solicitando para el acusado exactamente la misma condena. Mientras, la defensa, ejercida por la letrada Ana Reguera, pide la absolución y que, en caso de que se le condene, solamente sea por un delito de abusos sexuales y no por todos los que se le imputan. La defensa señala que ve contradicciones en el testimonio de la víctima.