Estribela tendrá aceras de dos metros y lombos para reducir la velocidad a 30 kilómetros por hora

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

M.G.

La reforma de la PO-546 incluye voladizos para ganar espacio peatonal

21 sep 2021 . Actualizado a las 22:59 h.

El proyecto de la primera fase de la reforma de la PO-546, a su paso por Estribela, comprenderá aceras a dos lados con un mínimo de dos metros de ancho, tres pasos de cebra elevados y una limitación de la velocidad del tráfico a 30 kilómetros por hora. Además, ordenará el aparcamiento, que se modificará según la preferencia de la seguridad peatonal en un tramo de 500 metros, que va desde el límite municipal con Marín en Cantodarea hasta la rotonda del acceso al puerto en Os Praceres. La obra tendrá un coste de 868.331 euros y un plazo de ejecución de doce meses. Tras su publicación en el Diario Oficial de Galicia, hoy empieza su período de exposición pública para que los vecinos e interesados puedan aportar sus alegaciones al proyecto. Este trámite de audiencia pública remata el 3 de noviembre. En el mismo anuncio en el DOG figuran las doce parcelas que se ven afectadas por expropiaciones.

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez; el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López; y el jefe territorial de la AXI, Manuel Juanatey, fueron los responsables de la presentación de este proyecto. La conselleira indicó que se trata de un vial con un «tráfico moi intenso», ya que por esta carretera circulan 5.532 vehículos al día de media. En la actualidad tiene varias deficiencias importantes, sobre todo en la disposición de las aceras, con puntos intransitables para los peatones. La conselleira añadió que el diseño del proyecto fue una tarea compleja, porque es una zona muy urbanizada a ambos márgenes de la carretera y además hay un fuerte desnivel en uno de sus costados de hasta nueve metros en algunos puntos, lo que obligará a la instalación de tramos de voladizos para el paso de los viandantes.

En la explicación técnica del proyecto, Juanatey manifestó que se han incluido tres pasos elevados de peatones, que reforzarán la seguridad de los vecinos. Asimismo, la velocidad se restringe a 30 kilómetros por hora, dando continuidad a un límite que ya tiene este vial en su tramo de Marín. La intervención en la vía incluye una calzada de 3,20 metros y de dos carriles, así como de un aparcamiento en aquellas zonas donde tenga encaje y no merme la anchura de las aceras.

La obra prevé el fresado de la calzada y la instalación de un nuevo pavimento, así como la señalización horizontal y vertical nuevas, la instalación de 26 luminarias y marquesinas para las paradas del autobús. Se repondrán los servicios afectados y se ejecutará un muro de mampostería en uno de los tramos donde hará falta apoyar el voladizo. El calendario previsto por la conselleira para la obra es que finalice el trámite de alegaciones el 3 de noviembre, que se pueda licitar en el primer trimestre del 2022 y comenzar las obras en verano.

Por su parte, Ethel Vázquez también adelantó algunas de las líneas maestras de la segunda fase de la reforma de la PO-546, en el tramo comprendido entre la rotonda de Os Praceres y el núcleo de Mollavao. Para este trayecto, la Administración autonómica quiere mejorar el entramado de las aceras y la creación de un carril bici de unos cuatro kilómetros. Este proyecto se encuentra todavía en fase de estudio sobre las posibles soluciones técnicas para atender la demanda de la seguridad vial de esta carretera.

El Gran Montecelo, en el «cronograma previsto»

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, también explicó en su comparecencia en Pontevedra que los trabajos del Gran Montecelo están «en marcha según el cronograma previsto». La titular autonómica manifestó que esta obra es la más grande y cuantiosa de las que está realizando la Xunta en la comarca.

Vázquez sostuvo que las excavaciones están ya realizadas y que queda solo una parte pendiente de un servicio afectado de gas. La conselleira apuntó que se está trabajando en las cimentaciones y que las obras van avanzando conforme a lo que se había contemplado desde el principio, sin retrasos ni incidencias destacables.

La depuradora de Os Praceres está ya en fase de pruebas

Los trabajos de mejora de la estación depuradora de aguas residuales de Os Praceres (EDAR) han entrado en su etapa final y los nuevos equipos de tratamiento se encuentran ya en fase de pruebas, según indicó la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez. Asimismo, la titular autonómica precisó que están también iniciados los trabajos de colocación del nuevo emisario submarino para la ría, que partirá desde esta EDAR. Dado que el sistema de colocación de la tubería es novedosa en España se están fabricando las piezas fuera y se están trasladando a Pontevedra, donde serán ensambladas. El objetivo es que también esté finalizado en el 2022.