La Audiencia de Pontevedra retoma el juicio por los 1.700 kilos de coca del Titán

PONTEVEDRA

Ángel Medina G.

En el banquillo, veintiún acusados para quienes solicitan un total de 224 años de cárcel y 2.400 millones de euros en multas

16 jul 2021 . Actualizado a las 23:06 h.

Tras las dos suspensiones previas por la baja médica de las defensas de la veintena de acusados, la semana próxima la Audiencia de Pontevedra acogerá las primeras sesiones por los 1.700 kilos de cocaína intervenidos en agosto del 2017 a bordo del Titan III. De este modo, el calendario previsto contempla que entre el 20 y el 21 de julio se aleguen las cuestiones previas, presumiblemente muchas de ellas instando la nulidad de actuaciones, mientras que del 20 de septiembre al 1 de octubre se desarrollará el juicio propiamente dicho.

Si inicialmente fueron arrestadas una treintena de personas en el marco de esta investigación, finalmente la causa judicial se dirige contra un total de veintiún encausados. Fuera de la misma quedaron, de este modo, Manuel Charlín, su hijo Melchor y su sobrino José Benito, así como una serie de empresarios de Cambados y Toledo. De igual modo, tampoco se sentará en el banquillo el brasileño Paul Wouter a quien, supuestamente, «le correspondía el control sobre la carga de cocaína con la que atraviesa el Atlántico el remolcador Titán III, pues de hecho la cocaína se cargó en las inmediaciones de Guyana, donde tiene grandes contactos con organizaciones de la zona».

La Fiscalía sostiene que «bajo la dirección de Mario Otero y Paul Wouter y coordinados de modo directo por Mario, se encargaron tanto de garantizar el aprovisionamiento del cargamento de cocaína, como de posibilitar su introducción última en nuestro territorio empleando otro barco». Las penas solicitadas para los veintiún encausados suman suman 224 años de cárcel, mientras que las multas alcanzan los 2.400 millones de euros.

Una de las bazas del ministerio público son las escuchas telefónicas, toda vez que las mismas posibilitaron los seguimientos de los sospechosos y la interceptación del alijo de cocaína. Así, la acusación relata como el 7 de agosto fue abordado el Titán III y sus cuatro tripulantes arrestados «cuando el buque se encontraba averiado». De igual modo, fue intervenido el pesquero con puerto en Ribeira, Sempre Cacharelos, en el que supuestamente se iba a trasvasar la droga para cubrir la recta final de la travesía trasatlántica: «En ese momento se encontraba parada y faenando para dar una mínima cobertura a su singladura».