Hallan muerto en Pontevedra a uno de los implicados en la última redada contra el clan de Os Ferrados

Alfredo López Penide
L. Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Capotillo

El cadáver de Rubén C.Q. fue encontrado en una finca particular en Salcedo

14 jul 2021 . Actualizado a las 18:46 h.

La Policía Nacional tuvo constancia este martes por la mañana de la muerte de Rubén Q. C. en una propiedad privada de la parroquia de Salcedo. Todo parece apuntar, en principio, a que este pontevedrés de 34 años se quitó la vida.

Rubén fue uno de los implicados hace escasos meses, a principios de octubre del año pasado, en el marco de la operación Rutenio-Butacar, investigación conjunta del Equipo contra el crimen Organizado (ECO) de la Guardia Civil, y la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional de Pontevedra centrada en el denominado clan de Os Ferrados, también conocido como de los Butaneros, en Campelo, en el municipio de Poio.

Por aquellas fechas, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia precisó que se decretaba el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de cuatro de los once detenidos, mientras que para un quinto, si bien decretó la prisión, se estableció la posibilidad de eludirla previo pago de un fianza. Los restantes sospechosos habrían quedado en libertad con cargos, ya fuera tras comparecer judicialmente o en sede policial. Se les acusaba de delitos de blanqueo, contra la salud pública y organización criminal.

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Los investigadores reseñaron entonces que «el grupo criminal tenía una estructura altamente jerarquizada y especializada, destacando la violencia ejercida por sus integrantes». Además de los arrestos, se llevaron a cabo registros en distintos domicilios e instalaciones, ubicados en la capital pontevedresa, además de en Poio y Mos, así como en las ciudades de Ourense y Ponferrada.

Estas fuentes añadieron que gestionaba negocios «tapaderas» relacionados con la compraventa de vehículos a motor y desguaces, «lo que facilitaba el blanqueo de capitales, fruto de los importantes beneficios económicos procedentes de esta actividad. Se intervinieron veintisiete kilos de hachís, seis de marihuana, así como diversas cantidades de cocaína, heroína y LSD, pero también dos armas de fuego, más de cincuenta mil euros en efectivo y varios automóviles.