El hospital de Pontevedra tendrá consultas y cirugías de mañana y tarde  para recuperar lo aplazado por el covid

María Hermida
María Hermida REDACCIÓN / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

La actividad empezó a intensificarse en mayo y se prevé seguir al mismo ritmo todo el verano. Se dan citas para hacer pruebas incluso al anochecer

12 jun 2021 . Actualizado a las 04:29 h.

La pandemia revolucionó los hospitales de casi todo el mundo, entre ellos los del área sanitaria de Pontevedra, con el de Montecelo como gran punto de referencia para el covid-19. Pero, tras un tiempo de bajada continua de los casos activos y paralelamente el efecto de las vacunas al alza, la tendencia está clara: el coronavirus, si bien sigue presente, ya no capitaliza toda la actividad del hospital. Pasados esos duros momentos, cuando el covid obligó a suspender cualquier tipo de actividad no urgente -se mantuvo lo más grave- toda recuperar la normalidad. Y, según confirman fuentes de la dirección asistencial del área sanitaria Pontevedra-O Salnés, en el Chop se está haciendo a marchas forzadas, como en otros hospitales gallegos. Así, ya desde mayo, la actividad es intensa con un objetivo: recuperar todo lo que fue quedando aplazado por la pandemia, desde cirugías de todo tipo, como las vasculares -las habituales varices- o de cualquier otra especialidad.

Según confirman desde la citada dirección asistencial, fue en mayo cuando se empezó a trabajar de forma intensa para recuperar toda esa actividad asistencial que, a cuenta de la pandemia, tuvo que quedar relegada para atender los casos de covid. Se trabaja tanto en consultas como en quirófano mañana y tarde. Y, al parecer, se va a seguir con esos mismos horarios intensos durante los meses de verano. Hay citas a todas horas, incluso al anochecer, por ejemplo para hacer pruebas como radiografías.

Sin una planta exclusiva

Adolfo Baloira, responsable de Neumología en el Chop, reconoce que la semana pasada llegó a emocionarse cuando la planta de su especialidad dejó de estar dedicada exclusivamente a enfermos de coronavirus: «Fue emotivo porque hubo momentos muy duros, en los que los casos de covid que teníamos eran tantos que ocupaban buena parte del hospital. Pero todo se fue reduciendo, eminentemente por el efecto de las vacunas y ahora mismo no tenía sentido que contasen con una planta entera, con 21 camas, cuando ya tenemos muy poquitos pacientes con covid ingresados y la tendencia es clara y es a la baja», manifiesta el médico.

Lo que se decidió, por primera vez en toda la pandemia, es que los enfermos que den positivo vayan a la planta que les correspondería si tuviesen otra dolencia. Es decir, si da positivo una persona que ingresó en la especialidad de Medicina Interna se quedaría en esa planta. Lógicamente, en una habitación individual. Los que internen ya tras haber dado positivo, si presentan problemas respiratorios -lo más habitual- irán a la planta de Neumología, pero esta no estará reservada entera para ellos, como hasta ahora, sino que habrá pacientes que no tengan covid. Eso sí, nunca estarán juntos en la habitación, lógicamente, para evitar que se produzcan contagios. Se empezó a funcionar así hace una semana para poder proseguir con la actividad asistencial ahora que bajó la incidencia.