Aceptan penas de cárcel por trapichear desde un molino a orillas de Os Gafos

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

LÓPEZ PENIDE

La suspensión de la pena, condicionada a un tratamiento de desintoxicación

28 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque inicialmente se enfrentaba a peticiones de penas que oscilaban entre los dos años y tres meses y los cuatro años y tres meses, finalmente las condenadas que han recaído sobre los cuatro acusados son de ocho meses, en el caso de tres de ellos, y de un año y medio, en el supuesto de un cuarto. Estas penas van acompañadas de multas y todo parece apuntar en la dirección de que la suspensión del ingreso en un centro penitenciario estará condicionado a que se sometan a una tratamiento de desintoxicación de las drogas.

Las detenciones, practicadas entre octubre del 2016 y enero del año siguiente, fueron consecuencia de una investigación conjunta de la Policía Nacional y la Local que, en su día, fue bautizada como operación Itinere. La misma conllevó la identificación y, posterior, propuesta para sanción administrativa de una decena de supuestos clientes.

Este operativo tuvo sus orígenes en las quejas vecinales que alertaron a la Policía Local de que en la Rúa do Muíño, más concretamente en el entorno de un molino a orillas del paseo de Os Gafos, «reuníanse numerosos mozos, tanto no horario de maña como de tarde, os cales se dedicaban a consumir sustancias estupefacientes e traficar, especialmente en horarios escolares». Agentes municipales, ya en el mes de septiembre, establecieran un dispositivo de vigilancia que constató un movimiento de personas anómalo, al tiempo que confirmaron la presencia de menores en horario lectivo. De hecho, alguno de ellos adquiría droga y la fumaba «con absoluta tranquilidade» sin importarle la presencia de terceras personas.

A la hora de coordinar las transacciones de droga, el fiscal reseña en su escrito de acusación que «tanto para comprarse entre ellos las sustancias estupefacientes como para concertar ventas con otros consumidores, (...) se comunicaban en muchas ocasiones a través de mensajes telefónicos de WhatsApp y Telegram». De este modo, concluyó que los acusados «venían dedicándose de modo habitual a la venta al menudeo de sustancias estupefacientes, fundamentalmente hachís y marihuana, que en ocasiones se compraban entre ellos mismos para luego venderlas a terceras personas».

Cuarto sospechoso

En cuanto al cuarto, en el escrito del fiscal consta que en su domicilio fueron intervenidos «198 gramos netos de marihuana; 7,454 gramos netos de hachís; 3,347 gramos de MDMA y 15,475 gramos netos de cocaína». Matiza que todas estas sustancias «las tenía destinadas a la venta a terceras personas, y algunas de ellas, parte de la cocaína y el MDMA, estaban ya introducidas en bolsitas de plástico».