Diez cascadas para visitar en Pontevedra y O Salnés

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Rutas de senderismo y de barranquismo permiten acercarse a las «fervenzas» que discurren por las laderas de la comarca

18 abr 2021 . Actualizado a las 19:59 h.

Pontevedra y O Salnés ofrecen a vecinos y turistas una amplia variedad de cascadas, desde las más accesibles y aptas para visitas por todos los públicos a las que prácticamente solo se puede llegar con actividades de barranquismo. Como recursos de turismo verde y alejado de los centros urbanos, existen cascadas de innegable belleza natural en ocho municipios de este ámbito de la provincia.

La más conocida de todas es Barosa, en Barro. Aquí el Concello habilitó hace años una zona recreativa, amplio aparcamiento y una ruta que sigue la ladera enlazando los numerosos molinos que le dan un aspecto singular. A la entrada hay también mesas y bancos para comer y poder pasar un día o una tarde agradable en estos días de primavera.

En Caldas de Reis, se halla Segade, otro lugar donde se puede disfrutar de la caída del Umia desde lo alto de una ladera. El Concello tiene la intención de rehabilitar la fábrica de la luz, situada en este entorno. El acceso se puede hacer tanto a pie en una ruta desde el casco urbano remontando el río como en coche, que se puede aparcar cerca de la fervenza.

En Cuntis, la ruta del río Gallo discurre por un trazado donde no hay una, sino dos pequeñas cascadas en un bosque de ribera tradicional: As Campaíñas y Herbado. Esta opción requiere de tres horas a pie, ya que se prolonga por 10,5 kilómetros.

Por su parte, en Valga, está la cascada de Raxoi, en el monte Cerquido, donde se encuentran también los molinos de Parafita -algunos están restaurados-. Se accede desde la N-550 y está señalizada, aunque Protección Civil avisa de que parte de la ruta está cerrada por el mal estado de las pasarelas.

En Cerdedo-Cotobade, el alcalde, Jorge Cubela, explica que el Concello se implicará esta primavera en la promoción de sus saltos de agua. Entre ellos destacan las Pozas da Freixa, en el lugar de Dorna, parroquia de Santa María de Sacos; y A Cova da Moura, en Quireza. Ambas se pueden visitar con el programa de rutas saludables del Ayuntamiento.

En Ponte Caldelas, el río Verdugo oculta dos cascadas de muy difícil acceso: A Roca, en A Insua, y Rego do Inferno, en Taboadelo. La primera está incluida en las actividades de barranquismo, porque además tiene la peculiaridad de ser una sucesión de saltos de gran atractivo paisajístico.

En A Lama, la ruta Tralos Pasos do Río Xesta permite a los senderistas conocer esta zona de la Serra do Suído, muy cerca del límite con la provincia de Ourense. En su trazado se encuentra la Fervenza de Liñares, un llamativo salto del río Xesta.

Otro de los municipios con cascadas en la comarca es Poio, donde se puede seguir la ruta de los molinos de Pereiro.