Sanidade emplaza a los comuneros de Mourente a un reunión para abordar la situación de los terrenos sobre los que se asienta el hospital
15 abr 2021 . Actualizado a las 11:59 h.Estos días, la Comunidade de Montes de Mourente ha sido emplazada por escrito por la Consellería de Sanidade a una reunión «entre as dúas partes para tratar sobre os terreos nos que se asenta o actual Hospital Montecelo». Tras precisar que aún no se ha concretado la fecha, se espera que en el encuentro los representantes de la Xunta comuniquen a los vecinos «a decisión das autoridades sanitarias para regularizar a situación legal destes terreos, que actualmente son propiedade da Comunidade de Montes».
Todo parece apuntar en la dirección que la reunión se celebrará antes de que comiencen las obras de construcción del denominado Gran Montecelo, por lo que «os representantes veciñais confían en poder chegar a un acordo para o establecemento dun canon anual de arrendamento dos terreos». En este sentido, recordaron que un anterior encuentro. en febrero del año pasado, ya trasladaron a las autoridades sanitarias gallegas una oferta.
De hecho, incidieron en que la propuesta vecinal fue calificada por los representantes autonómicos de «moi razoable e interesante», circunstancia que lleva a pensar a los comuneros que el acuerdo puede ser próximo o inminente. A este respecto, aludieron a que un canon resolverá la «situación irregular» derivada de la sentencia del Tribunal Supremo de julio del 2018 que reconoce la titularidad vecinal del monte de Mourente y, por tanto, de los terrenos sobre los que se asienta el Hospital de Montecelo en Pontevedra.
«Os comuneiros de Mourente teñen depositadas as súas esperanzas en que a reunión prevista para os próximos días resolva esta situación de xeito definitivo», insistieron. No en vano, el comunicado de Sanidade parece ser respuesta al escrito del pasado marzo a través del cual los vecinos de Mourente solicitaban una respuesta de la consellería a la oferta realizada en febrero del 2020, semanas antes de que se decretara el primer estado de alarma por el coronavirus.
En aquel escrito se lamentaban del retraso de la Xunta en contestar, al tiempo que se amenazaba con «acudir aos tribunais se comezaban as obras de ampliación do Hospital sen regularizar a situación dos terreos».