El covid cierra la lonja de Campelo

Marcos Gago Otero
Marcos Gago POIO / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

Los positivos de algunos trabajadores y el confinamiento de otros dejan a la rula sin personal para las subastas

18 ene 2021 . Actualizado a las 10:47 h.

Las cofradías de Raxó, San Telmo y Lourizán acordaron la suspensión de la jornada de trabajo en el marisqueo en el fondo de la ría de Pontevedra. La proliferación de casos de covid en el municipio de Poio también se ha extendido a la lonja, donde parte de sus trabajadores dieron positivos y el resto está confinado o a punto de serlo. Sin personal suficiente para atender la lonja y el riesgo incluso de quedarse sin ninguno las cofradías optaron, de acuerdo con las agrupaciones de mariscadores de cada pósito, la suspensión de la jornada de trabajo de este lunes. Es la primera vez que ocurre en Galicia que una lonja se tenga que cerrar como consecuencia del impacto de la pandemia.

El presidente de la lonja de Campelo, Iago Tomé, explicó que uno de los trabajadores dio positivo y otros dos compañeros están confinados al ser contactos directos. Otro más dio positivo ayer y a primera hora de esta mañana solo faltaba por llamar para que se confinase en su domicilio a uno más. Existía el riesgo de que las mariscadoras saliesen a trabajar, llevasen el producto a la lonja y luego no pudiesen venderlo, porque no hubiese quién pudiese hacerlo según continúan las llamadas a los contactos directos por parte de la central de seguimiento de contactos, dependiente del Sergas. «Da maneira en que estamos, sen persoal, non ten sentido ir a traballar», indicó Iago Tomé. Tampoco está claro que los compradores fuesen a la subasta de esta tarde, porque de una manera u otra se exponen a contacto con los trabajadores de la lonja durante las pujas. 

El caso del presidente de la lonja y patrón mayor de Raxó es un ejemplo de lo que está pasando en Poio. Él mismo ya no pudo salir de su vivienda desde el pasado viernes, cuando se detectó un positivo entre sus contactos estrechos. Finalmente él también acabó dando positivo en la PCR que hizo el fin de semana. Su caso no es el único. En Poio hay también mariscadoras que han dado positivo en covid y la situación preocupa entre los vecinos.

Petición de cribado para el marisqueo

Al otro lado de la ría, en Os Praceres, la patrona mayor de Lourizán, María del Carmen Vázquez, pidió esta mañana a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, que se acuerde con el Sergas un cribado específico para el sector del marisqueo. Vázquez indica que mientras la gente está en la playa recogiendo la almeja están muy separados, pero cuando regresan del mar para el punto de control existe más riesgo de contacto entre los trabajadores. Asimismo, Vázquez indicó que tampoco es lógico ir a trabajar para después, con casi total probabilidad, no poder vender. «Si no hay quien haga las subasta, ¿qué hacemos con la mercancía en la lonja?», señala. 

En el plan del marisqueo en la ría de Pontevedra para esta semana solo estaba previsto como jornada laboral este lunes. No volverán a tener otro día de trabajo hasta la próxima semana y las cofradías confían en que para esa fecha las cosas estén mejor y puedan volver a reabrir la actividad normal en el parqué de Campelo.