«Vuelvo después de cuatro meses con las expectativas muy altas»

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

El jugador del Cisne Gonzalo Carró entrena con el equipo después de cuatro meses al margen por lesión

13 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Gonzalo Carró volvió esta semana a entrenar después de cuatro meses apartado del Cisne por una lesión que no le dejó ni empezar la liga con el equipo por el que había fichado. En plena pretemporada, cuando la plantilla se preparaba para el debut en Asobal, el jugador sufrió una lesión en el hombro izquierdo que de un plumazo enterró su ilusión. Era uno de los refuerzos más importante del Cisne para su campaña en la élite del balonmano nacional, pero no tuvo tiempo de demostrar su capacidad. Tuvo cuatro meses por delante de recuperación hasta que el pasado 28 de diciembre, cuando visitó al médico que lo operó, supo que podría volver. «Me dio el alta, en principio cuando fui no sabía si la tendría, pero la verdad yo me encontraba súper bien y antes de irme me dijo ‘espero que no nos volvamos a ver'», señala Carró, que recalca que «estaba deseando recuperar la normalidad y la rutina. Vuelvo después de cuatro meses con las expectativas muy altas».

Desde que el médico le dio el alta ha ido probándose a si mismo hasta que el pasado lunes retomó los entrenamientos con el grupo. Durante estos cuatro meses apartado del día a día del equipo, el jugador ha visto como el equipo debutaba en la categoría y como ha cambiado con el paso de los meses. Reconoce que ha sido muy difícil no poder ayudarlos en los malos momentos, especialmente en la primera parte del campeonato, cuando encadenaron más derrotas, estuvieron asilados por varios positivos en el equipo y Chapela tuvo que abandonar el Cisne por motivos profesionales. «Sabía que el equipo había hecho un esfuerzo muy grande por incorporarme y es difícil poder apoyarlos desde fuera. Estaba diariamente en los entrenamientos, pero no es lo mismos», apunta Gonzalo Carró, que notó un cambio significativo en el equipo en la segunda parte de esta primera vuelta. «Eso nos ha permitido llegar vivos a la segunda vuelta», sentencia. Estuvo sin ejercitarse las seis semanas posteriores a la operación y a partir de ahí, cuando dejó de tener el brazo en cabestrillo, empezó a trabajar con los readaptadores Alberto Mariño y Sergio Rey hasta alcanzar el nivel físico actual.

Amistoso este viernes

El jugador hispano argentino espera que en este regreso pueda aportar «en defensa y en ataque». Sabe que el equipo seguirá fiel a su juego, con el mismo sistema que impuso Jabato para despuntar en la División de Honor Plata y que ahora sigue alimentando con el trabajo del equipo.

A la vuelta de Gonzalo Carró se suma a la incorporación de Oleksander Nekroshet, que aunque ya entrenaba con el equipo, no podía empezar hasta el próximo febrero. «Con la llegada de los dos se ganarán kilos en defensa y experiencia. Podemos aportar a lo que ya se está haciendo para mejorar y conseguir puntos. Venimos para reforzar», concluye Carró.

Después de haber pasado lo peor, reconoce que de sufrir una lesión fue el mejor momento. Al ser operado del hombro antes de empezar la liga solo se perdió el arranque de la competición y podrá coger ahora el ritmo del equipo. Incluso tener un mes por delante antes de retomar la competición le viene bien. Asobal está parada por el Mundial de Egipto que se celebra estos días y eso permitirá a Gonzalo Carró coger ritmo antes de empezar el próximo 6 de febrero. Este viernes espera tener la primera prueba con el amistoso que disputarán contra el Novás en el pabellón municipal.