¿Es seguro este juguete?

Alfredo López Penide
López PEnide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

POLICÍA NACIONAL

A la hora de adquirir un regalo, solo hacerlo en puntos de venta de confianza

23 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

A finales de la semana pasada, un operativo de la Policía Nacional desmanteló en Madrid lo que se consideró como uno de los mayores centros de distribución para toda España, incluida aparentemente Pontevedra, de juguetes y productos sanitarios ilegales. «La operación policial se ha llevado a cabo acorde a la cercanía de las fiestas navideñas, en el que el consumo de juguetes y otros productos se ve incrementado de manera considerable», reseñaron desde ese cuerpo.

A raíz de esta actuación, la pregunta esta clara: ¿Son seguros los juguetes? La respuesta es sí, siempre y cuando se adopten una serie de precauciones. La primera, adquirirlos siempre «en tiendas o a proveedores en línea que sean de confianza, ya que son especialmente cuidadosos con la elección de los juguetes que venden y normalmente aceptan devoluciones», refieren desde Consumo.

En caso contrario, uno se puede encontrar con «comerciantes poco escrupulosos [que] suelen ignorar las instrucciones de salud y seguridad y puede que, incluso, comercien con falsificaciones».

Asimismo, hay que cerciorarse de las recomendaciones sobre la edad indicada y las precauciones que se deben adoptar, al igual que hay que huir de aquellas mercancías que «no lleven claramente el marcado CE en el mismo juguete o en su embalaje». A este respecto, y a través de uno de sus documentos públicos, Consumo despeja una de las dudas respecto del marcado CE: «No está pensado para servir de orientación al consumidor, [pero] sí es un compromiso del fabricante del juguete de que este cumple con todas las reglas de seguridad de la UE, que son de las más estrictas del mundo».

En el caso concreto de los menores de 3 años, nada de juguetes con piezas pequeñas desmontables. A tan tierna edad es habitual que intenten llevárselas a la boca, lo que podría provocarles una asfixia, de igual modo que un regalo inadecuado para la edad o la destreza de un pequeño podría ocasionarle algún tipo de lesión.

También un juguete roto o en mal estado podría suponer un riesgo para los niños, como los plásticos y envoltorios. Es por ello que hay que eliminarlos -reciclándolos si es posible-, no así las instrucciones, que hay que guardar siempre.

En cualquier caso, las inspecciones de los puntos de venta existentes en Pontevedra son habituales comprobándose no solo la mercancía que se comercializa, sino también las licencias y autorizaciones. De este modo, se minimiza el peligro de que en estos tiendas se oferten falsificaciones y productos que puedan generar un riesgo, aunque, en ocasiones, se detectan y se emiten alertas a nivel nacional y europeo que los consumidores pueden cotejar.

Modus operandi

Entonces, ¿cómo se explica que un entramado como el desarticulado en Madrid pudiese operar y llegase a almacenar para su distribución inmediata 1.352.785 juguetes falsificados -así como 2.727.946 unidades de productos sanitarios-? Esta red había ideado un innovador sistema para introducir las mercancías inicialmente adquiridas en China en el mercado nacional. Y es que los juguetes llegaban por diferentes medios y rutas de forma fraccionada y por piezas hasta una nave industrial ubicada en la localidad de Ponto, donde eran ensambladas.

Acto seguido, se redistribuían a diferentes puntos de venta del polígono Cobo Calleja, que, a su vez, ejercían de proveedores de esos mismos productos a otros vendedores situados en diferentes puntos de todo el país.