Una segunda vida para los objetos, una nueva oportunidad para las personas

CAROLINA SERTAL PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Ramón Leiro

Boa Vida lanza una campaña de Navidad centrada en la economía circular

28 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Promover una economía circular para que la solidaridad repercuta de forma directa en la población de Pontevedra en riesgo de exclusión es el principal objetivo de la campaña de Navidad puesta en marcha por la asociación Boa Vida este año.

La entidad, que recibió ayer la primera donación en el marco de esta campaña, un total de diez mamparas protectoras aportadas por el Club Rotary, hace un llamamiento a que la ciudadanía «revise» lo que tiene en casa y se anime tanto a donar como a regalar productos de segunda mano.

«Queremos convidar ao consumo responsable promovendo unha economía circular, porque ese é o verdadeiro sistema para que a solidariedade chegue directamente aos seus propios veciños», comenta la presidenta de Boa Vida, Pepa Vázquez, quien destaca que se empieza a notar la otra cara de la pandemia.

En este sentido, Vázquez apunta que han registrado un importante incremento de usuarios con respecto al año anterior, así como una notable variación en el perfil de los mismos: «Cada vez chegan máis persoas con titulacións universitarias que se están quedando sen recursos e que tardan moito en pedir axuda».

A este respecto, la presidenta de Boa Vida insiste en que antes de llegar a una situación límite se busque ayuda, puesto que en Pontevedra no faltan asociaciones o colectivos que puedan servir un plato de comida, dar ropa de abrigo o herramientas para poder sobrellevar la situación. Así, considera este mensaje fundamental, ya que a la larga «o deterioro psicolóxico é maior e o proceso de recuperación máis lento. Temos comprobado que á xente da nosa comunidade lle custa moitísimo pedir axuda e nós insistimos en que non hai que ter vergoña», apunta.

Vázquez comenta que esto es tan solo un pequeño atisbo de lo que está por venir, puesto que la asociación tiene comprobado que, ante una crisis, «o incremento real da demanda de axuda chega a partir dos seis meses ou incluso até un ano despois. Inicialmente a xente tira dos aforros, aínda contan con apoios de familiares que seguen traballando ou prestación por desemprego, e así van soportando o impacto».

En la actualidad, esta asociación pontevedresa presta asistencia a 300 personas residentes en la ciudad y que se encuentran en situación de vulnerabilidad, mientras que tan solo cinco o seis pertenecen a municipios de la comarca. Cabe destacar que Boa Vida mantiene su actividad gracias a la solidaridad de los vecinos de la ciudad y a la financiación de la Xunta a través del Fondo Social Europeo.