Los notarios eligen a José María Graiño Ordóñez como su decano en Galicia

Marcos Gago Otero
Marcos Gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CONSEJO GENERAL DEL NOTARIADO

El elegido es notario desde 1987 y tiene su despacho en Caldas de Reis

16 nov 2020 . Actualizado a las 10:32 h.

Los notarios gallegos eligieron ayer a su decano del Colegio Notarial de Galicia, un cargo que desempeñará los próximos cuatro años José María Graiño Ordóñez, de 62 años, es notario desde 1987 y actualmente tiene su despacho en Caldas de Reis. La nueva junta queda compuesta de la siguiente manera: José María Graiño Ordóñez, decano; María José Gil, notaria en A Coruña, vicedecana; Jaime Romero, de Vigo, censor primero; Montserrat Trigo, de Lugo, censora segunda; José María Rilo, de Rianxo, tesorero; María del Carmen Carreira, de Melide, secretaria.

Según explicó el Consejo General del Notariado de España, las líneas de actuación de Graiño en los próximos cuatro años serán: «Mantener las relaciones de colaboración institucional con la Universidad, los distintos tribunales de Justicia, la Fiscalía, la Academia Gallega de Jurisprudencia, los diferentes colegios profesionales, el Parlamento y la Xunta de Galicia». El nuevo decano se ha marcado también como objetivos «apoyar a la Academia en la preparación a notarías y a la fundación Aequitas; avanzar en el desarrollo de la mediación y en potenciar la digitalización y el desarrollo de la Administración electrónica».

Graiño añadió que el control de la legalidad es una de las señas de identidad que definen su profesión. «El notario controla la legalidad y es un pilar básico del sistema de seguridad jurídica preventiva español, cuya piedra angular es el documento público. Tiene el deber de asesorar imparcialmente, interpretar, configurar y autentificar con arreglo a la Ley la voluntad de las partes». Asimismo, el notario debe «velar por la parte más débil, reequilibrando los contratos para que los consumidores no resulten perjudicados».

Desde el Colegio Notarial se señaló que en los primeros ocho meses de este año, se autorizaron 256.325 documentos en las 163 notarías gallegas. Entre los servicios más demandados destacaron: testamentos (37.413), capitulaciones matrimoniales y uniones y disoluciones de parejas de hecho (3.532), compraventas de inmuebles (20.542), herencias (17.166), créditos, préstamos y garantías hipotecarios (88.417), poderes (26.922), actas (30.706), pólizas (70.653) y asuntos societarios (13.550).