Así son los primeros días del curso más atípico en la Escuela Naval de Marín
06 oct 2020 . Actualizado a las 10:15 h.Atípico. Este quizás es uno de los adjetivos que más se repite cuando se habla del curso académico que ha comenzado hace apenas unos días y lo cierto es que se encuadra con todo lo que están viviendo los alumnos de la Escuela Naval Militar de Marín. Y es que atípico lo está siendo todo desde que franquearon las puertas de las institución académica y vieron como se les tomaba la temperatura, se les realizaba un test serológico rápido -a ocho de los 295 futuros oficiales de la Armada les detectaron la presencia de anticuerpos, si bien las PCR posteriores le dieron negativo- y se les repartieron mascarillas, pieza que se ha convertido ya en parte de su uniformidad y que, incluso, emplean para superar, incluso, la pista de obstáculos.
Los 91 alumnos de primer curso, entre los que se encuentran trece mujeres, empezaron el 11 de septiembre la fase de adaptación a la vida militar, que culminó el 25 de septiembre. En este período, según resaltan desde la Armada, «comienzan a recibir formación moral, militar, marinera y técnica necesaria para desempeñar su futuro profesional».
Días antes, la propia Escuela Naval anunciaba la implantación de un Plan de Actuación durante la normalidad laboral, de tal modo que «la detección temprana de posibles casos y contactos estrechos -sistema de rastreo-, así como su aislamiento y cuarentena será uno de los puntos clave para conseguir el buen desarrollo del presente curso».
Además, se confirmó que «las salidas para descanso se producirán durante el fin de semana bajo unas condiciones muy restrictivas y unas medidas de seguridad e higiene exhaustivas».