Cuando las noches de restricciones acaban de copas en el bingo y hasta la madrugada

La Voz

PONTEVEDRA

ANA GARCIA

Locales de juego de la ciudad detectan el aumento de usuarios el fin de semana

18 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«En el local donde trabajamos somos seis positivos y estamos en aislamiento». Quien pone voz a esta declaración es un empleado de una conocida cafetería pontevedresa. Prefiere no dar su nombre ni quiere que se dé el del local en la que trabaja, pero reconoce que en su sector fue un efecto dominó el que les llevó a caer a uno detrás de otro. El primer caso en esta empresa se originó en un bar de copas, ahora cerrado por covid. Ese es uno de los focos a los que este miércoles hacía referencia el comité clínico, como origen de brotes numerosos. «Cerrar el ocio nocturno comprimió en una hora las copas, al salir de currar ibas a tomarte unas cervezas en una hora», apunta este joven, que solo ha tenido algo de fiebre y malestar. En esa hora coincidían muchos profesionales del sector, que seguían la fiesta en el bingo, de Cobián Roffignac, o en algún 24 horas. «Se puso de moda el bingo, como no tiene licencia de bar abrían hasta las tres de la mañana, pero también hay quien va a la gasolinera de Vilaboa, que tenía el bar abierto», apunta uno de los empresarios de la noche.

Acabar la noche jugando

Son varias voces las que han encontrado en el bingo el mejor lugar para acabar una noche que ya estaba prohibida. «Yo estuve el último fin de semana y había colas por la calle para entrar, las empleadas estaban cabreadas porque la gente iba a beber», apunta una joven, que trabaja en el comercio local. Desde el bingo confirman el aumento de usuarios el fin de semana. Reconocen que con las restricciones en la ciudad cierran a la una. Y lo prefieren. «Venía mucha gente joven para tomar las últimas copas y están de cachondeo, era una lucha para que no molestasen al resto», apunta la encargada del bingo pontevedrés, que recalca que «jugaban un par de cartones y tomaban unos cubatas».

El aforo completo de esta sala de juegos permite el acceso a 274 personas. Ahora están al 50 % y con el cierre obligado a la una de la mañana, pero en cuanto se levanten las restricciones podrán volver a abrir hasta las tres. «En Vigo siguen abiertos y hay muchos que van hasta allí», explican distintas voces de la noche pontevedresa.