El comedor sigue en el aire a una semana de empezar y con 800 inscritos

n. d. amil / B. Villaverde PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Educación y la Fanpa esperan concretar hoy si se podría garantizar el servicio en Pontevedra

04 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Están en tiempo de descuento. Queda una semana para que empiece el cole y más de 800 familias han solicitado el servicio del comedor en los centros públicos de Pontevedra sin saber qué pasará el próximo jueves 10 de septiembre cuando sus hijos comiencen las clases. La conciliación familiar está pendiente de una reunión que hoy mantendrá el jefe territorial de la Consellería de Educación, César Pérez Ares, y los representantes de la Federación Provincial de ANPA (Fanpa). Será una encuentro previo en la que esperan llegar a una solución, antes de que a las 20.00 horas se sienten juntas todas las asociaciones de padres.

De lo que ocurra hoy esperan que salga el sí o el no a los comedores. De un lado está la Xunta y del otro, la Fanpa, encargada de la gestión del servicio, que exige saber quién va a asumir el coste del personal, de la limpieza, y lo más importante, de quién será la responsabilidad en caso de que haya contagios. Aunque inicialmente se pensó que la demanda podía sufrir una fuerte caída como efecto de la pandemia, la realidad que se han encontrado, no tiene nada que ver. No se llega a los 900 del año pasado, pero los 800 inscritos de este mes son un reflejo de las necesidades. El presidente de la federación, Rogelio Carballo, reconoce que «hay muchas cuestiones por resolver, los padres no saben ni cómo va a funcionar el plan madruga».

En una entrevista en Radio Voz, Pérez Ares recalcó que «dende a Xefatura Territorial sempre mantivemos unha actitude dialogante». Foanpas -que agrupa a las Anpas de Vigo y comarca- no darán el servicio de comedor en buena parte de los colegios de la ciudad. «Se o comedor escolar do Lope de Vega (en Vigo), con 500 comensais e de xestión directa funciona, qué razón hai para que Foanpas non abra os seus comedores. Sempre tivemos vontade, sempre, pero outra cousa e se hai alguén que quere facer política cós comedores», señala Pérez Ares que espera llegar a un entendimiento para los colegios de Pontevedra: «Trátase de colaborar e tirar para adiante e non facer dano á conciliación familiar».

Eso sí, en los micrófonos de Radio Voz dejó claro que tendrán que abrir con la misma dotación económica que el pasado curso porque «o que hai é que optimizar os recursos». El responsable territorial de Educación pone sobre la mesa la posibilidad de que se modifique la última hora lectiva en función del comedor y puedan así hacerse dos turnos con el mismo número de personal. A pesar de la negativa de ampliar la partida para este servicio, deja la puerta abierta a que pueda cambiar «vendo as circunstancias».