En la vivienda se intervinieron casi dos kilos de hachís, coca y marihuana
08 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.A mediados de septiembre del año pasado y en el marco de la operación Triunfo, la Guardia Civil desmanteló una narcovivienda en Chancelas, en el municipio de Poio, con el arresto de una pareja. Por aquel entonces, desde la Comandancia de Pontevedra destacaron que el operativo había permitido el decomiso de, entre otros efectos y drogas, 137 gramos de cocaína, cerca de seiscientos de marihuana y algo más de 1.200 de hachís.
No ha transcurrido ni un año de esta operación y la Audiencia de Pontevedra ya ha condenado a los dos arrestados. La sentencia es consecuencia de un acuerdo de conformidad, de tal modo que el joven de 30 años que residía en esta casa aceptó tres años de cárcel -lleva en prisión desde que fue arrestado- y el pago de una multa de 27.794 euros al estimarse una agravante de reincidencia y una atenuante de drogadicción, mientras que su novia, que carecía de antecedentes, asumió un año y el pago de 9.264 euros en veinticuatro mensualidades. A mayores, en el caso de esta última, de 35 años, se acordó la suspensión de la pena privativa impuesta condicionada a que en el plazo de dos años no delinca. En caso contrario, podría revocarse el beneficio.
Se considera acreditado que, entre mayo y septiembre del 2019, ambos se dedicaron «a la venta a terceras personas de diversas cantidades de hachís, marihuana y cocaína en su domicilio de Chancelas. La Audiencia de Pontevedra desglosa hasta media docena de transacciones que habrían sido acreditadas por los agentes de la Guardia Civil.
Acreditadas estas ventas, el 13 de septiembre, el juez instructor autorizó la entrada y registro del domicilio, lo que propició el hallazgo de distintas cantidades de droga en diferentes dependencias del inmueble, caso del dormitorio principal y la cocina. A este respecto, la sentencia recoge que «el valor total de las sustancias vendidas a terceros y las halladas en el domicilio es de 27.794,55 euros».
Efectos intervenidos
Además, se intervinieron tres básculas de precisión, dos bolsas con sustancia de corte, tres cuchillos con restos de cannabis, varios recortes de bolsas de plástico utilizados para elaborar papelinas, una libreta con diversas anotaciones de personas y cantidades, tres teléfonos móviles, dos cámaras digitales y 2.100 euros en metálico, procedentes de anteriores ventas. A raíz de la operación Triunfo, la Guardia Civil estimó desarticulado «un importante punto de venta y distribución de estupefacientes» en el municipio de Poio.