Las grúas con cizalla de la empresa Ángel Pérez ejecutan el despiece del Albacora Diez
01 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Como si de las fauces de un gran dragón se tratase, las cizallas de la empresa Ángel Pérez, van desperezando en el puerto de Marín, sin prisa pero sin pausa, el Albacora Diez, un buque atunero que, en tiempos no muy lejanos, surcaba el océano para abastecer de pescado el mercado español. Al final de su larga trayectoria por medio mundo, el Albacora Diez atracó hace tres años en el puerto de Marín y una vía de agua en el casco amenazaba con hundirlo, suceso que de haber tenido lugar habría constituido un grave problema. La única solución fue su venta para el desguace, pasando de los muelles de carga a las instalaciones de la empresa marinense, gestor autorizado para el desguace de buques -fue la primera firma en Galicia en conseguir esta homologación en el 2003-.
El encargado de Ángel Pérez e hijo del fundador, Juan Luis Pérez, explica que se trata de un atunero de 77 metros de eslora y de 14 de manga. El trabajo burocrático es bastante largo. En este caso se solicitó el desguace en octubre del año pasado y se concedió la autorización final en abril de este ejercicio. Rematado el papeleo, se procedió al vaciado de sus depósitos de aceites, combustible y cualquier sustancia susceptible de ser contaminante, todo bajo estrictas medidas de seguridad ambiental. Una vez que remató esta fase, se pudo dar inicio a su desguace propiamente dicho.
Juan Luis Pérez explica que en su empresa utilizan máquinas con cizalla, porque son más respetuosas con el medio ambiente y son igual de efectivas.
Se estima que el Albacora Diez permitirá obtener unas 1.000 toneladas de hierro con destino más probable a Megasa Siderúrgica, en Narón-, además de madera y otros residuos, que se tratarán según los protocolos establecidos. Desde su fundación, en 1999, esta compañía ha desguazado más de 100 barcos.