La presa del Umia es una de las tres en alerta por cianobacterias

Cristina Barral Diéguez
CRISTINA BARRAL PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Augas de Galicia decretó ese estado en el embalse el 16 de julio

27 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El embalse del Umia, en Caldas de Reis, es uno de los tres gallegos que está oficialmente en estado de alerta por la presencia de cianobacterias en sus aguas. En el caso del pantano de A Baxe se activó por parte del organismo Augas de Galicia el pasado 16 de julio. Las otras dos presas que están en alerta son de la provincia de A Coruña: la de As Forcadas, en Valdoviño, y la de Santa Uxía, en Dumbría.

Respecto al embalse de A Baxe, la alerta se produjo este año más tarde que en el 2019, cuando se activó el 24 de junio. Desde la Consellería de Infraestruturas inciden en que se trata de un fenómeno natural que se desencadena todos los veranos, con mayor o menor intensidad, cuando se produce una subida de las temperaturas y un aumento de las horas de luz solar. Eso, sumado a los nutrientes del agua y a la disminución de las reservas, da lugar a la floración de un alga, la Microcystis, que tiñe de verde su lámina de agua. Desde el 2011 se aplica un tratamiento con corteza de eucalipto sumergida. Aunque esta cianobacteria no es la única presente en A Baxe. La alerta se activó por el nivel de cianobacterias que había en la captación de Segade, de la que se abastece Caldas. El 13 de julio se contabilizan 6.025 células de Microcystis por mililitro de agua. La situación ha mejorado en esa zona, pero no así en la presa, donde el 20 de julio se registraban 33.500 células.

Lo que conlleva la activación del estado de alerta es un mayor control por parte de los técnicos, con analíticas más frecuentes del agua. Por el momento, la situación del embalse del Umia, que está verde tanto en la presa como en la cola, no afecta al proceso de depuración ni al abastecimiento a la población. Tampoco ha trascendido que se haya tomado alguna medida en relación con la prohibición del baño en zonas del malecón del Umia o en la cascada de Segade, como sí ocurrió algún año.