Abordaron ya más medidas de control tras suspender la rapa
20 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Integrantes de la Asociación Rapa das Bestas de Sabucedo salieron ayer a los montes para afrontar labores de control de los equinos, además de revisar cierres o proceder a su alimentación. Ya lo habían hecho durante la jornada sabatina, horas antes de que los vecinos de esta parroquia de A Estrada se reuniesen y decidiesen por mayoría suspender la rapa del 2020, ya postergada sobre sus fechas habituales del primer fin de semana julio. En el calendario se había marcado el fin de semana del 15 y 16 de agosto como alternativa, pero finalmente se descartó esa opción por seguridad sanitaria y este rito ancestral con siglos de historia quedó pospuesto hasta el 2021.
La decisión supondrá a Rapa das Bestas intensificar el cuidado de los animales mostrencos en los propios montes. Habrá más control de las manadas aunque la habitual desparasitación y corte de las crines en el curro se posterga hasta el próximo año. Los desbroces y el mantenimiento de los espacios por donde campan los equinos cobrarán más protagonismo, así como el seguimiento a través del GPS, mientras duren las baterías de los equipos al no poder cambiarse aprovechando la bajada de las reses para la rapa. Una manada, la de Sabucedo, que supera el medio millar de ejemplares.
Felicitación de Libera
La asociación animalista Libera, por su parte, mostró ayer su felicitación a los vecinos de Sabucedo por su decisión de suspender la Rapa das Bestas por motivos sanitarios. Este colectivo pide además una reconversión de esta fiesta de interés turístico internacional para el 2021. Para ello esgrimen las 168.000 firmas recogidas a través de la plataforma Change.org y repensar su celebración, además de solicitar a la Xunta mayor implicación antes de otorgar los permisos para celebrar los curros.
Desde Libera insisten en que el trato a los animales en celebraciones como la de Sabucedo serían sancionables si se tratase de animales domésticos o de ganado vacuno y porcino. Abogan porque el cuidado para garantizar el bienestar y salud de los equinos se prolongue todo el año, no solo durante los días de la rapa y proponen reconvertir esta fiesta con ayudas económicas y técnicas. Reconocen el carácter etnográfico y el peso histórico de esta cita ancestral, pero creen que las tradiciones deben evolucionar con los tiempos.