Embiste con su barco de recreo dos veces a una dorna con tripulantes a bordo en la ría de Pontevedra

Parecía un accidente. Pero no lo era. El día 20 de este mismo mes, el 112 alertó a distintos medios de salvamento debido a que, en teoría, se había producido un choque fortuito entre dos embarcaciones en la ría de Pontevedra. Concretamente, se trataba de una colisión entre una dorna de Poio que andaba pescando choco, y en la que iban dos tripulantes, y un barco de recreo, con una persona a bordo, en la zona entre Campelo (Poio) y la isla de Tambo. En realidad, y según la investigación llevada a cabo después por la Policía Local de Poio, ese no fue un accidente sin más, sino un posible delito. Supuestamente, el barco de recreo, al mando de un vecino de Marín, embistió dos veces a la dorna en la que iban dos tripulantes de Poio, provocando una situación de peligrosidad en el mar y quedando dañado la lancha pesquera. 

Tras el percance en el mar, los tripulantes de la dorna movieron ficha. Acudieron a la Policía Local de Poio porque su barco tenía daños y explicaron lo sucedido. Dijeron que el barco de recreo llegó a embestir contra su embarcación en dos ocasiones. Contaron también que, tras hacer la fechoría, el tripulante de ese mismo barco se esfumó enseguida hacia el puerto de Marín.

Los agentes comenzaron a investigar y lograron localizar a esa persona. Investigan a este marinense por un delito de daños y otro de injurias y el caso quedó en manos del juzgado de guardia. Según los agentes locales, el hombre en cuestión no quería que los marineros de Poio faenasen en esa zona, de ahí que embistiese su barco. 

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