El Seprona no halla evidencias nítidas de un vertido tóxico en la muerte de peces del Lérez

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

GUARDIA CIVIL

La hipótesis que se maneja es «una bajada repentina» de la salinidad de las aguas

05 may 2020 . Actualizado a las 12:36 h.

En el marco de la investigación abierta por la mortandad de peces ocurrida el pasado fin de semana en el río Lérez a su paso por Pontevedra. De este modo, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia determinaron que los primeros cadáveres aparecieron el viernes, 1 de mayo, en el límite superior de la zona de desembocadura del río, entre el puente del ferrocarril de Monte Porreiro y la playa fluvial.

Añadieron, en este sentido, que, debido al gran caudal de estos días a causa de las lluvias y la acción de las mareas, los peces muertos se dispersaron hasta llegar más allá del puente de la autopista AP-9 que cruza la la ría.

Ante tales evidencias, con el auxilio y colaboración del Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil, el Seprona recorrió e inspeccionó el tramo superior de la desembocadura del rio, «sin que se encontrasen más peces muertos ni rastro de vertidos tóxicos». En cualquier caso, los investigadores pasaron aviso al 112 para activar, en su caso, el prevenido protocolo de control de vertidos.

Desde la Comandancia, finalmente, señalaron que «las investigaciones realizadas por el Seprona concluyen que la mortandad fue selectiva. No afectó a la fauna piscícola fluvial, solo a especies marinas, fundamentalmente a la especie conocida como Salpa o Salema, que normalmente se desplaza en grandes bancos por la parte del río de agua salobre». De igual modo, «tampoco se encontraron evidencias nítidas de un posible vertido, ya que de ser así hubiera afectado a toda la fauna».

Pese a estas evidencias, se optó por tomar muestras de agua para su posterior análisis.

A este respecto, se aludió al hecho de que este episodio, «tan singular, se puede asociar por analogía con el sucedido a comienzos del mes de marzo donde pasó algo similar». Y en ambos casos, «en el marco temporal de abundantes lluvias», por lo que la hipótesis que se maneja, «a tenor de las consultadas realizadas con científicos relacionados con esta materia, no se descarta una posible causa natural, como podría ser una bajada repentina en la salinidad del agua».