El músico Luis Emilio Batallán, positivo por coronavirus

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

MARTINA MISER

«Estoy en cuarentena y todo va bien», reconoce el propio autor a través de redes sociales

03 abr 2020 . Actualizado a las 10:32 h.

El cantante y médico jubilado Luis Emilio Batallán ha dado positivo por Covid-19. Así lo ha reconocido el propio autor de Aí ven o maio o Quen puidera namorala a través de Twitter. En su comunicado, señala que «di positivo en test de coronavirus», al tiempo que precisa que «estoy en cuarentena y todo va bien».

De igual modo, aprovecha para hacer un llamamiento a la población en general: «Usen mascarilla por favor y eviten el contacto con las personas de más riesgo que son las que tienen patologias previas». 

Asimismo, y ante el interés de otros usuarios de esta red social, Batallán precisa que «va todo bien», así como apunta que «pienso que estoy fuera de peligro».

Natural de Santiago, Batallán (1948) ejerció durante años como médico en Moraña. Su carrera musical arrancó en los años setenta y, de hecho, su primer trabajo discográfico, Aí ven o maio, se convirtió en el disco más vendido en gallego al vender medio millón de copias e inauguró lo que se ha venido en llamar la tercera vía de la música gallego, esto es, al componer temas que se mueven entre la canción política y de protesta social y la canción popular y más cercana a ritmos pop. 

Tendrían que pasar quince largos años hasta que Luis Emilio Batallán sacase su segundo disco, Ballet da nena (1990), un periodo de tiempo en el que, sin embargo, no estuvo alejado de la música. Dos años después vería la luz Eres un fármaco y, de nuevo, otro parón de quince años hasta que volvió a meterse en un estudio para publicar Tu retrato (2007). Luego vendrían Había que chegar (2014) y, ya más recientemente, 70 y 29 (2016).

Emilio Moldes

En su perfil de Facebook, resalta las colaboraciones con Pablo Milanés, Joaquín Sabina o Joan Manuel Serrat.

A finales de agosto del 2018, protagonizó un encierro y huelga de hambre en el Colegio Oficial de Médicos de Pontevedra para «protestar por su jubilación forzosa como facultativo de familia a los 65 años. El médico morañés recurrió por vía judicial, pero con esta medida de presión quiere denunciar también los recortes que afectan a la sanidad pública», refiere la crónica de Cristina Barral.

Posteriormente, y a raíz de las recomendaciones del médico que supervisaba su estado de salud y tras ser ingresado en Montecelo como consecuencia de la falta de alimento, Batallán decidió terminar con su huelga de hambre.